Desde su presentación, el Audi etron ha sido un éxito en casi todos los sentidos. Ha recibido una buena acogida por los clientes en cuanto a diseño, su enrome calidad de materiales y su sistema de propulsión. Algo que ha provocado que las 20.000 unidades que tenían previsto fabricar el primer año hayan volado en forma de reservas en pocas semanas. Pero el etron tiene un problema con la autonomía, y desde Audi no se ha indicado cuál es el origen.
Esto se ha puesto de manifiesto hace unos días, cuando la Agencia de Protección Medioambiental de los Estados Unidos publicaba los resultados de sus pruebas de homologación. Un ciclo EPA que ha dado como resultado una cifra realmente modesta para el gran todocamino alemán. Apenas 328 kilómetros.
Se trata de una cifra claramente es muy baja si tenemos en cuenta por ejemplo que el Tesla Model X de 75 kWh logra bajo este mismo formato 384 kilómetros. Una cifra que sube hasta los 466 km para la versión de 100 kWh. Esto quiere decir que con 5 kWh más, el Model X logra un 42% más autonomía que el Audi.
Está claro que aquí hay algún problema. Según expertos como Venkat Viswanathan, profesor de ingeniería mecánica en la Universidad Carnegie Mellon, situada en Pittsburgh, Pensilvania, la razón de esta mala cifra puede estar en dos factores.
El primero es que Audi ha sido extremadamente cauteloso a la hora de poner un margen de protección a las baterías. Según los datos oficiales, el etron solo usa un 88% de su batería. Algo que le colocan casi 10 puntos por debajo de lo habitual en el mercado, y que dejaría la capacidad útil final en 83.6 kWh. Pero la diferencia seguiría siendo muy grande, ya que recordemos que se coloca en autonomía un 17% por detrás el Model X de 75 kWh.
Para el profesor Viswanathan, el problema puede tener su origen en aspectos como la aerodinámica, pero también por un menor nivel de eficiencia del sistema de propulsión. Un elemento que podría estar consumiendo mucho más de lo que debería.
Otro de los sospechosos es el sistema de refrigeración de la batería. El etron cuenta con un sistema por líquido, que tradicionalmente son mucho más efectivos a la hora de mantener el pack de baterías dentro de su rango de temperatura idóneo. Algo especialmente importante para un coche capaz de acceder a recargas de hasta 150 kW, y que además logra mantener casi hasta el 100% de su carga.
A esto se añade que se trata del primer coche eléctrico de Audi, por lo que el fabricante estaría tomando precauciones extra para evitar sorpresas desagradables, y por eso destinaría más energía a mantener la batería dentro de unas temperaturas perfectas. Un proceso que otras marcas, como la propia Tesla, hace años que han superado, y con cientos de miles de coches en la carretera, se pueden permitir el afinar más con este elemento.
De esa forma y a la vista de la buena acogida que está teniendo el etron, Audi lograría arrancar su programa de coches eléctricos con plena seguridad de que su primer vehículo logrará un rendimiento de durabilidad óptimo. Una experiencia que posteriormente le debería servir para desarrollar modelos mucho más eficiente y arriesgar un poco más en su planeamiento, para conseguir reducir el enorme hueco que le separa ahora mismo por ejemplo con la propia Tesla.
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Vía | QZ