A pesar de que la llegada de los grandes grupos al sector del coche eléctrico empieza a apagar un poco el ímpetu de las pequeñas startups, como ejemplo el abandono de Dyson, algunos continúan en su empeño en revolucionar un mercado que se mueve a una velocidad muy baja. Es el caso del Piëch Mark Zero, un superdeportivo eléctrico desarrollado por la empresa suiza Piëch Automotive, que quiere lograr llamar la atención con cifras como el lograr una recarga hasta el 80% en apenas cinco minutos.
Y es que nombres como Rivian,Canoo, Byton o la propia Piëch, necesitan un algo especial para llamar la atención de los inversores. Unos con una pickup de diseño futurista, otros con un modelo de venta por suscripción, y los últimos con un SUV dotado de una gigantesca pantalla central. En el caso de Piëch, la clave serán prestaciones de infarto, diseño atemporal, y una capacidad de carga sin igual.
A diferencia de muchos otros modelos eléctricos que aprovechan las oportunidades de diseño más flexibles que ofrecen los sistemas eléctricos, el Mark Zero tiene un diseño clásico proporciones con un capó largo y una zona trasera acortada. Esto supone todo un misterio ya que el coche lleva las baterías alojadas en los bajos y los tres motores en los ejes, por lo que sobre el papel en esta parte no debería contar con ningún elemento. Algo que ha alimentado los rumores de que habrá además de una versión eléctrica, una también dotada de un extensor de autonomía.
Además de su sistema de propulsión, del que no han dado una cifra de potencia pero que rondará los 400 CV, y una enorme batería que le otorgará 500 kilómetros de autonomía, el Mark Zero destaca por contar con una avanzada tecnología que le permitirá acceder a recargas ultra rápidas. De 0 al 80% en cinco minutos, o lo que es lo mismo, recuperar 400 km en apenas 240 segundos. Una cifra más que considerable que supondrá el tener que lidiar con masivas cantidades de calor.
Para lograrlo, Piëch está trabajando con empresas como el Grupo Desten, y los expertos chinos en carga rápida Qingdao TGOOD Electric, que tendrán ante si la titánica labor de lograr diseñar un sistema de baterías capaz de ofrecer una importante cifra de potencia de salida que mantenga el calor dentro de los límites aceptables tanto en la aceleración, de 0 a 100 km/h en 3.2 segundos, como sobre todo durante la recarga.
Durante la primea presentación del Mark Zero, Andrew Whitworth, director de operaciones de Desten, ha declarado lo siguiente: «Debido al proceso de patentado en curso, no podemos dar información más detallada sobre nuestras celdas de ión litio en este momento. Esto es lo que puedo revelar: creamos una celda en la que pueden fluir corrientes significativamente más elevadas, sin que casi ningún calor se genere durante la carga y la descarga, haciendo el proceso mucho más eficiente. Las pruebas las está realizando el TÜV (Asociación de Inspecciones Técnicas alemana) el proveedor de sistemas Hofer Powertrain, que trabaja para diferentes fabricantes de coches europeos, y la Universidad de Esslingen, que ya han probado y certificado nuestras celdas.»
¿Lograrán ofrecer lo que prometen y revolucionar el mercado, o estamos ante otro caso de vaporware que busca capitalizar un apellido ilustre de la mano de un sector en pleno crecimiento y que todavía busca el santo grial de la autonomía y la recarga?. Algo que sólo el tiempo nos dirá.
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