Tesla se ha marcado el objetivo de desarrollar y fabricar de forma interna la mayor cantidad posible de componentes, para de esa manera tener control sobre su producción, y también sobre sus precios. Algo especialmente importante en aspectos clave de sus vehículos como los motores, y también las baterías. Este último paso el más crucial y sobre el que ya están trabajando para no depender sólo de suministradores externos.
Y es que aunque la Gigafábrica de Nevada sea de Tesla y Panasonic, las baterías que salen de allí son fabricadas por los japoneses. Lo mismo para las celdas que llegan de Japón y que se extenderá a los acuerdos firmados con LG y CATL.
Pero hace tiempo que Tesla trabaja en lograr cierta independencia en este apartado, y esta semana se ha confirmado el inicio de los trabajos de una instalación de producción de baterías en Fremont, donde levantaran una donde comenzar a probar toda la experiencia que ha logrado acumular en estos últimos años.
No es algo nuevo y el pasado año Tesla compraba la empresa especializada en el desarrollo de baterías Maxwell por 235 millones de dólares. Una compra a la que posteriormente siguió la de Hibar, centrado en el desarrollo de maquinaria para fabricar celdas. Dos compras que se confirmaron durante la última conferencia de accionistas donde Tesla afirmó que estaban camino del desarrollo de sus propias baterías.
El resultado será no sólo que Tesla fabrique sus propias baterías, sino que podrá acelerar la evolución de las mismas donde podrá aplicar toda la investigación y desarrollo que han acumulado en los últimos años con las colaboraciones como la que con Jeff Dahn, jefe del grupo de investigación de baterías de Tesla en Halifax, que ha estado trabajando durante los últimos años en la creación de aditivos para el electrolito, lo que permitirá aumentar el rendimiento de las baterías.
Unos trabajos que buscan lograr bajar los costes hasta los 100 dólares el kWh, con por ejemplo la eliminación total del cobalto, al mismo tiempo que se logra un paso adelante en cuanto a densidad energética y volumétrica.
La pregunta es el cuándo. Está claro que este desarrollo no será compartido con Panasonic que pasará a ser un suministrador externo, algo más estrecho que el resto, pero que no formará parte de estos nuevos desarrollos. Unos trabajos que deberían estar listos para comenzar a producir celdas en 2021, momento en el que se espera comiencen los trabajos en la Gigafábrica de Alemania, donde ya han confirmado que producirán baterías y donde según las palabras del jefe de Panasonic en Estados Unidos, no tienen nada hablado con Tesla.
Una tecnología de baterías de la que sabremos más el próximo mes de abril, que será cuando Tesla realice una presentación donde se aguarda conocer los primeros detalles de una tecnología de baterías que permitirá al fabricante norteamericano dar otro salto adelante en rentabilidad y capacidad de producción que no se verá frenada por la falta de baterías.
