El lanzamiento de varios modelos eléctricos está viendo su debut ensombrecido por culpa de la falta de un suministro fiable de baterías. Es el caso de Audi etron, que ha tenido que paralizar varios días su producción en Bruselas, o del Jaguar i-Pace. Un problema que sigue un patrón habitual y que afecta a aquellas marcas que han comenzado su apuesta por el coche eléctrico de forma más tardía, mientras que las que lo han hecho de manera más temprana no están viviendo esta situación.
Es el caso de marcas como BMW, cuyos responsables han confirmado que no esperan tener problemas de suministro de baterías para sus actuales modelos electrificados, y tampoco para los nuevos lanzamientos que llegarán entre 2020 y 2021.
Esto según los responsables de la marca alemana, se debe al inicio de su apuesta por la movilidad eléctrica ya en 2013, con el lanzamiento del i3 y el i8. Algo que les ha permitido desarrollar una cadena de suministro robusta, y que han ido trabajando en su mejora constante desde entonces. Algo que dará como resultado según BMW, en 2021 el 20% de sus ventas serán coches eléctricos e híbridos enchufables. Un ambicioso objetivo para el que parece tendrán baterías suficientes.
Además el jefe de ventas de BMW, Pieter Nota, ha confirmado que también están trabajando con los fabricantes de baterías, Samsung y CATL, para lograr desarrollar la tecnología que permitirá por ejemplo que el próximo i4 cuente con una nueva generación de celdas durante su llegada al mercado en 2021. Algo que permitirá aumentar la densidad energética de los packs, reduciendo la necesidad de capacidad por unidad fabricada.
Podemos pensar que el volumen de ventas de BMW es muy bajo y fácilmente manejable en cuanto a suministro. Pero desde la marca indican que ya trabajan desde hace dos años en nuevos escenarios donde las ventas se incrementen de forma sustancial. Y como ejemplo la fábrica que CATL está levantando en Alemania, y de la que BMW se ha adelantado para asegurarse acceder a una buena parte de su producción.
El resultado esperan sea una capacidad de producción que se adapte a la demanda, y que la falta de suministro de baterías no sea un problema para una de las marcas que más temprano han apostado por el sector, y que logrará sacar partido a esta apuesta en factores como el lograr cumplir con los objetivos de emisiones para este año y el próximo. Algo que ahorrará a los bávaros una importante cantidad de dinero en multas.
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