Entre el maremagnum de startups que buscan hacerse un hueco en el mercado del coche eléctrico, hay una que destaca por lo diferente de su propuesta. Es la británica Riversimple, que quiere convertirse en el primer fabricante independiente en tratar de lanzar un coche a hidrógeno. Un modelo que a pesar de los problemas provocados por el coronavirus, ha mantenido su apuesta, y ahora prepara sus primeros prototipos funcionales.
Como recordamos, el Riversimple Rasa es un pequeño utilitario con dos plazas que monta una pila de combustible de hidrógeno 8.5 kW con un depósito de 1.5 kilogramos almacenado a una presión de 345 bares, con el que logra una autonomía de 483 kilómetros, necesitando sólo dos minutos para lograr repostar.
Entre las claves de su diseño está una aerodinámica muy trabajada, así como el montaje de cuatro motores, uno en cada rueda. Un aspecto que se suma a su chasis en fibra de carbono que le permite eliminar las partes de aluminio ubicadas en la parte delantera y trasera de la primera generación, con la consiguiente reducción de peso y que dejan el total en apenas 580 kilos.
A diferencia de los vehículos más comunes que funcionan con pila de hidrógeno, los cuales utilizan un pack de baterías de litio, el Riversimple Rasa utiliza para impulsar sus motores una serie de ultracondensadores que le permiten cargarse y descargarse de una forma mucho más eficiente que los modelos con baterías de litio.
Ahora la compañía ha enviado un correo indicando que a pesar de las dificultades por la pandemia han seguido trabajando en el desarrollo de sus nuevos prototipos, que se espera cuenten con algunas mejoras y que permitirán comenzar la fase de demostraciones públicas, paso previo al inicio de las ventas.
Una propuesta diferente que además llegará al mercado con un formato de venta por suscripción, donde el cliente tendrá que abonar una cuota mensual, unas 500 libras, que incluirán todo, desde el mantenimiento, seguro, impuestos, hasta el hidrógeno, con una pequeña tarifa a parte según los km recorridos.
Un modelo comercial que algunas marcas están experimentando y que será la base de este pequeño urbano a hidrógeno. Algo para lo que necesitan un último empujón económico, que han buscado completar con una campaña de crowdfunding que ya les ha permitido recaudar en anteriores ocasiones más de 2 millones de libras, y que ahora han completado con gran éxito al recaudar 396.000 libras, o un 198% de lo que esperaban lograr. Una señal de que hay demanda para este producto.
Una propuesta que veremos como se desarrolla en el complejo mercado particular, pero que cuenta con un gran potencial en el sector industrial donde la autonomía y los tiempos de recarga puedan ser cruciales a la hora de electrificar vehículos de transporte de mercancías o personas, y que ya está dentro de los planes de una Riversimple que espera poder desarrollar nuevas propuestas una vez lanzado el Rasa.
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