BMW iX: más de 500 CV de potencia y una autonomía superior a los 600 kilómetros para el buque insignia eléctrico de la marca bávara

Tras una larguísima espera, BMW ha presentado su último modelo eléctrico, el iX. Este SUV tendrá la tarea de convertirse en el buque insignia tecnológico de la firma bávara, liderando su ofensiva eléctrica… hasta la llegada del i7, una berlina de representación derivada del Serie 7 que se lanzará dentro de un par de años al mercado.

A pesar de no partir de ningún modelo térmico, es muy probable que el iX emplee una plataforma eléctrica derivada de la arquitectura multienergía CLAR. El vehículo presume de un diseño muy personal; sin embargo, aspectos como sus prominentes voladizos o su largo capó nos hacen pensar que no emplea una plataforma dedicada. Para contener el peso, BMW ha hecho uso de materiales como la fibra de carbono o el aluminio.

En el frontal todo el protagonismo recae sobre las finas ópticas (full LED de serie y LaserLight matriciales en opción), situadas en una posición relativamente elevada, y la falsa parrilla en forma de doble riñón tras la que se ocultan un radar, una cámara y otros sensores necesarios para los asistentes de conducción.

No faltan detalles como adimentos en color azul (también presentes en las taloneras y en el difusor trasero), que evidencian la naturaleza eléctrica del coche, así como la nervadura del capó, que engloba el logo de la marca (bajo el cual se localiza la boca de llenado del agua de los limpiaparabrisas) y se incrusta en los «riñones». Bajo el capó no hay un segundo maletero; de hecho, ni siquiera se puede abrir, operación que solo es posible en el servicio técnico.

En la línea lateral nos encontramos con unos peculiares pasos de rueda cuadrados que no terminan de encajar con la dinámica línea de la carrocería, mientras que en el pilar C llaman la atención tanto la pérdida de la clásica curva de Hofmeister como el uso de una inserción negra para simular un techo flotante. Los grandes protagonistas de la trasera son los pilotos en L reducidos a su mínima expresión y englobados en el portón (cuya boca de carga está bastante elevada) y el prominente difusor.

Según BMW, la longitud del iX es similar a la del X5, mientras que su anchura y altura equivalen a las del X6. Por lo tanto, debería rondar los 4,90 metros de largo, los 2 metros de ancho y los 1,70 metros de alto. Su distancia entre ejes de 3 metros se sitúa a caballo entre la del X5 y la del X7. Ubicado por lo tanto en el segmento E, su mayor rival será el Audi e-tron.

La aerodinámica del coche está muy cuidada (Cx de 0,25), algo que es posible gracias a soluciones como los tiradores de las puertas escamoteables automáticamente o las llantas opcionales Air Performance, que además serán un 15% más ligeras (el vehículo incorporará de serie llantas de 20 pulgadas, si bien también podrá equipar de 21 y 22 pulgadas).

El habitáculo tiene un enfoque minimalista y tecnológico. El protagonismo recae sobre el nuevo panel BMW Curved Display, formado por dos pantallas (un cuadro de instrumentos digital de 12,3 pulgadas y una pantalla táctil central de 14,9 pulgadas para el sistema de infoentretenimiento) sin marco y englobadas bajo una superficie de vidrio única.

Otros elementos de interés son el volante hexagonal (que recuerda al del Austin Allegro de los 70) con calefacción opcional, los altavoces ocultos, el Head-up Display casi invisible, los asientos con reposacabezas integrados, el techo panorámico con oscurecimiento electrónico, el sistema de audio 4D opcional de Bowers & Wilkins con treinta altavoces, el climatizador de cuatro zonas, y las superficies tapizadas en la plancha superior del salpicadero y en los paneles de las puertas.

En la consola central hay un selector de marchas y un controlador de cristal iluminado con entrada háptica. Por otro lado, BMW afirma que el iX estrenará un nuevo arsenal de asistentes de conducción avanzados, algo que ha sido posible gracias a una capacidad de procesamiento veinte veces superior a la de sus modelos actuales. Además, el coche disfrutará de actualizaciones OTA.

Al igual que el iX3, el iX hace uso de un tren motriz eDrive de quinta generación, en este caso formado por dos motores eléctricos (uno en cada eje, lo que le da tracción total) de desarrollo propio y libres de tierras raras, así como por una batería con una capacidad bruta superior a los 100 kWh. La potencia del coche es de más de 500 CV (370 kW), lo que le permite hacer el 0 a 100 km/h en menos de 5 segundos. La autonomía por su parte superará los 600 km WLTP.

En cuanto a la carga, el iX podrá acceder a potencias de 11 kW en alterna (recuperando el 100% de su rango en 11 horas) y de 200 kW en continua (pasando del 10% al 80% de carga en menos de 40 minutos; o lo que es lo mismo, recuperando 120 km en 10 minutos). La toma de carga se situará en la aleta posterior derecha. El modelo se fabricará en la planta alemana de Dingolfing, y se comercializará en la segunda mitad de 2021.

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