Volkswagen transformará la histórica fábrica de Wolfsburgo, corazón de la compañía, en su mayor planta de producción de coches eléctricos

Herbert Diess, director ejecutivo del Grupo Volkswagen, ha comunicado a los altos directivos de la compañía que su fábrica insignia, la de Wolfsburgo, se convertirá en su caballo de batalla contra Giga Berlín, la factoría que está construyendo Tesla en Alemania. Por lo tanto, Wolfsburgo seguirá los pasos de otras plantas como Zwickau o Hannover.

Wolfsburgo no solo fue la primera fábrica de Volkswagen, sino que a día de hoy es con diferencia la más grande de la multinacional, con una capacidad superior a las 800.000 unidades anuales. Por lo tanto, el objetivo de transformarla en un centro especializado en coches eléctricos evidencia el fuerte compromiso de la empresa con la electromovilidad.

Diess quiere que la planta de Wolfsburgo cumpla con el objetivo de Elon Musk, director ejecutivo de Tesla, de reducir el tiempo de producción de un coche eléctrico a diez horas. Esto equivale a menos de la mitad del tiempo empleado para fabricar un Golf o un Tiguan, los modelos que actualmente salen de las líneas de la factoría.

Estos planes también incluirán una reducción sustancial de los costes fijos (en un 5% para 2023), lo que permitirá a Volkswagen aumentar su competitividad frente a rivales como Stellantis. Recientemente Diess forzó un voto de confianza del Comité de Supervisión de Volkswagen tras enfrentarse a ciertas reticencias a su plan de electrificación, logrando una extensión anticipada de su contrato, que finalizaba en 2023.

Actualmente Volkswagen se encuentra en las etapas iniciales del despliegue de su gama eléctrica ID, que a día de hoy está compuesta por dos modelos (el compacto ID.3 y el SUV familiar ID.4). Sin embargo, a corto plazo la oferta del fabricante en este nicho del mercado se enriquecerá con utilitarios (ID.1), berlinas (ID.5) e incluso furgonetas (ID.7).

Aunque el principal centro de producción de coches eléctricos del Grupo Volkswagen será Alemania, algunas factorías como la checa de Mlada Boleslav también han comenzado a fabricar vehículos de este tipo recientemente (en este caso, el Skoda Enyaq iV). Por el momento se desconoce el papel que tendrán las fábricas españolas del grupo (Martorell y Landaben) en estos planes, si bien la planta catalana aparentemente está tratando de conseguir la adjudicación de plataforma MEB Entry para coches eléctricos asequibles.

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