El principal escollo para la rentabilidad del Volkswagen ID.4 es el coste de sus baterías
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Publicado: 11/05/2021 13:56
El Volkswagen ID.4 no es un modelo rentable. Así lo ha confirmado Thomas Ulbrich, responsable del departamento de Estrategia y Gestión de Calidad del Grupo Volkswagen. «Durante su lanzamiento en Estados Unidos, el ID.4 no será un automóvil rentable. Pero se volverá rentable a lo largo de su primer ciclo de vida comercial».
El principal problema al que se enfrentan los fabricantes a la hora de crear vehículos eléctricos asequibles es el coste de las baterías: mientras que el elevado precio de los modelos «premium» permite absorber dicho coste extra, en automóviles de enfoque más económico como el antes mencionado Volkswagen ID.4 esto es más complicado.
Eric Noble, de la consultora CarLab, advierte además de que la creciente demanda de minerales para producir baterías conllevará un incremento en los precios de dichas materias primas. «Cuando sube la demanda, también suben los costes. Es una dura lección para los fabricantes de automóviles, acostumbrados a rebajar los costes con mayores volúmenes de producción. […] Los costes de los minerales no funcionan así».
Ulbrich por su parte indica que algunos problemas iniciales en la fábrica alemana de Zwickau también están impidiendo al ID.4 ser todo lo rentable que pudiera durante los primeros compases de su vida comercial. Tampoco hay que perder de vista que el año que viene Volkswagen comenzará a producir el ID.4 en Chattanooga (Tennessee), lo que también debería permitir mejorar los márgenes de beneficio obtenidos por el modelo en Estados Unidos.
«No es solo una cuestión de desarrollo, también hay una parte relativa a la rampa de producción en la planta. Todo es nuevo, no ha [alcanzado el pico] de eficiencia, etc. Y este es el punto que realmente tienes que optimizar, y luego se convierte en un paso a paso después de dicha aceleración, incluida la optimización del propio producto».
Sin embargo, el ejecutivo admite que para lograr rebajar los costes serán necesarias nuevas químicas para las baterías. Si a esta ecuación le sumamos la necesidad de lograr mayores autonomías, tenemos como respuesta la tecnología del electrolito sólido, por la que Volkswagen está apostando a través de sus inversiones millonarias en QuantumScape.
«Realmente estamos siguiendo esta tecnología y su evolución. Creo que permitirá incrementar las autonomías más de lo que habíamos predicho. Es la tecnología que necesitamos. De lo contrario, las baterías se vuelven demasiado grandes y pesadas, y es muy ineficiente transportar tanto peso», sentencia Ulbrich.
Fuente | Automotive News Europe
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