Cuando FCA (FIAT-Chrysler) y PSA (Peugeot-Citroën, Opel) anunciaron su unión para formar Stellantis a principios de año, eran muchos los que apostaban por la desaparición de algunas de las marcas del conglomerado resultante, que necesitaría soltar lastre de su extenso catálogo. Sin embargo, finalmente esto no fue así.
Carlos Tavares, director ejecutivo de Stellantis, anunció por sorpresa que todas las marcas del grupo recibirían fondos para demostrar su viabilidad a lo largo de los próximos diez años. Esta decisión supuso confirmar la supervivencia de Lancia, una histórica marca que llevaba años languideciendo bajo la batuta de los dirigentes de FCA.
Otrora un reputado fabricante con una merecida fama labrada en el mundo de los rallies, Lancia a día de hoy solo tiene presencia en un único mercado (Italia) con un único modelo (Ypsilon). Sin embargo, su buen desempeño en su país natal (a pesar de su veteranía, el Ypsilon fue el segundo automóvil más vendido de Italia en 2020) han decantado la balanza hacia su supervivencia… por ahora.
Luca Napolitano, consejero delegado de Lancia, ha anunciado ahora una completa reestructuración de la firma, que ha sido integrada en la misma unidad de negocio que Alfa Romeo y DS, las otras dos marcas premium de Stellantis. Las tres desarrollarán conjuntamente soluciones técnicas específicas para poder plantar cara al tridente alemán (Audi, BMW y Mercedes-Benz), que actualmente domina con puño de hierro este nicho del mercado.
Paolo Loiotile será el nuevo responsable de Productos de Lancia, Yann Chabert se encargará del departamento de Marketing y Comunicación, y Erica Valeria Ferraioli será responsable de Precios tanto de Alfa Romeo como de Lancia. Roberta Zerbi por su parte será responsable de Alfa Romeo y Lancia para Europa.
Además, el director de diseño de Stellantis, Jean-Pierre Ploué, se encargará también de supervisar de forma directa el diseño de los modelos de la marca. «El renacimiento de Lancia es un desafío realmente emocionante. Es una marca icónica, que será restaurada a su posición histórica central en Europa, aprovechando su enorme potencial».
Dado que Alfa Romeo, DS y Lancia actuarán bajo una misma división, se espera que las dos marcas italianas sigan a la francesa en su estrategia de abandonar los modelos térmicos en 2025: a partir de dicha fecha, DS solo comercializará híbridos enchufables y eléctricos puros. Por lo tanto, el futuro de Lancia pasa por la electrificación, algo que será posible gracias a las plataformas modulares de Stellantis.
A falta de confirmación oficial, se espera que los primeros modelos eléctricos de Lancia sean un utilitario llamado a sustituir al Ypsilon, así como un B-SUV, el segmento de moda en Europa. Tanto uno como otro harán uso de la plataforma eCMP de segunda generación de Stellantis. Más adelante también podrían unirse un compacto (Delta) y un C-SUV, ambos con versiones híbridas enchufables y eléctricas.
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