Vorsprung 2030: el nuevo plan estratégico de Audi para convertirse en una marca 100% eléctrica

Audi está acelerando sus planes de electrificación. Si hace unas semanas la firma de los cuatro aros confirmaba que de cara al año 2033 tendría una gama 100% eléctrica en Europa (no así en mercados como China o Estados Unidos, donde mantendrá sus modelos térmicos durante algo más de tiempo), ahora ha presentado su nuevo plan estratégico Vorsprung 2030 para acometer dicha transformación.

Esta hoja de ruta contempla dos fechas clave: 2026, año a partir del cual todos los nuevos lanzamientos de la compañía serán 100% eléctricos; y 2033, momento elegido para finalizar la producción de sus modelos térmicos. Aunque esta transición no será tan rápida como la de rivales como Volvo, que se ha propuesto ser cero emisiones para 2030, sí supone un objetivo más ambicioso que el perseguido por sus compatriotas de BMW y Mercedes-Benz.

Markus Duesmann, director ejecutivo de Audi, afirma que esta estrategia permitirá asegurar la supervivencia de Audi a pesar de la fuerte transformación que sufrirá la industria del automóvil durante los próximos años. «La estrategia corporativa ‘Vorsprung 2030’ garantizará que Audi siga siendo viable durante mucho tiempo en el futuro. El ritmo del cambio en nuestra sociedad está aumentando rápidamente y por ello estamos acelerando nuestra propia transformación».

En paralelo, el fabricante premium también priorizará una estrategia de crecimiento rentable y el desarrollo de áreas estratégicas que le permitan diferenciarse. CARIAD, la división de software del Grupo Volkswagen, desarrollará de cara al año 2025 una plataforma de software escalable con un sistema operativo estandarizado y conectividad en la nube común para todas las marcas del conglomerado.

Audi apostará por la conducción autónoma

Esta plataforma permitirá a Audi ir un paso más allá en terrenos como la conducción autónoma, un sector en el que Volkswagen actualmente colabora estrechamente con Ford, pues ambas controlan la empresa de conducción autónoma Argo AI, creada para plantar cara a Aurora, Cruise (General Motors), Tesla y Waymo (Google).

Al igual que el resto del Grupo Volkswagen, en el futuro el hardware de los Audi estará más estandarizado. Aunque los clientes podrán seguir eligiendo el color, las llantas, la tapicería o el tamaño del pack de baterías de su automóvil, la inmensa mayoría de equipamientos se podrán activar mediante actualizaciones de software, lo que simplificará enormemente la producción de vehículos.

Además, Audi quiere convertirse en una marca más rentable, abandonando nichos del mercado poco lucrativos como el segmento B (utilitarios), en el que actualmente se encuentra presente a través del A1. Por el momento, su coche eléctrico más pequeño será el Q4 e-tron, un SUV familiar de 4,59 metros de largo que ya se encuentra a la venta.

Fuente | Motor.es

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