Hace ya tres años, cuatro de los pesos pesados de Japón del mundo de la motocicleta unieron sus fuerzas creando un consorcio de baterías intercambiables: Honda, Kawasaki, Suzuki y Yamaha. El año pasado alcanzaron un acuerdo para estandarizar dichas baterías y que sirviesen para nuevos modelos. Gachaco es una nueva empresa que materializa dicha colaboración en algo más tangible.
Oficialmente denominada Gachaco, Inc., esta empresa con sede en Tokio fue fundada el 1 de abril, coincidiendo con la apertura del año fiscal japonés. Está participada al 51% por ENEOS, al 34% por Honda, y los demás socios al 5% cada uno: Kawasaki Motors, Suzuki y Yamaha Motor. La empresa se dedicará a la gestión de baterías y estaciones de intercambio como un servicio al motorista.
En otras palabras, un sistema batería como servicio (BaaS), en el que el motorista compra la moto o la alquila de alguna forma, pero las baterías no forman parte del paquete. Cuando necesite cambiar una gastada por una cargada solo ha de acercarse a una estación de intercambio, dejar la gastada y coger otra ya cargada. Esto le supondrá una cuota mensual con derecho a x intercambios al mes.
¿Pero qué es Eneos? Si no estamos muy puestos en el sistema empresarial de Japón, deciros que es un holding de empresas del sector petroquímico y metalúrgico en proceso de reinvención. En el futuro abarcará negocios de la era ecológica como es el suministro de hidrógeno y energías renovables, reciclaje, hidrógeno verde, servicios de movilidad, granjas solares, etc.
El hecho de haberse unido los fabricantes más importantes de motos en torno a una solución estandarizada permitirá popularizar mucho más las motos eléctricas sin que el usuario tenga que preocuparse ni de tener enchufe ni de andar subiendo y bajando baterías a su piso o al trabajo. A partir de otoño empezarán a verse por Japón los intercambiadores de baterías Gachaco con los paquetes Honda Mobile Power Pack e, empezando por Tokio y en lugares céntricos como estaciones de tren y gasolineras de Eneos.
Gachaco no limitará su actividad al intercambio de baterías para motos urbanas, también se abre a otros sectores como el doméstico, maquinaria industrial, vehículos de reparto de última milla y otras aplicaciones portátiles. La empresa se encargará de mantener el parque de baterías, y las que vayan perdiendo prioridades se destinarán a otros usos o acabarán siendo recicladas para reincorporarse a la cadena.
