La refrigeración por inmersión ayudará a duplicar la vida útil de las baterías y bajar sus costes
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Publicado: 14/07/2022 12:43
La refrigeración de las baterías es uno de los principales retos de ingeniería a la hora de desarrollar y fabricar un vehículo eléctrico. Principalmente pensando en aquellos sectores intensivos donde se necesitan grandes potencias y donde mantener la temperatura es crucial para la eficiencia y la vida de las propias celdas. Ahora el fabricante taiwanés Xing Mobility ha presentado en Alemania una propuesta que usa un revolucionario sistema de refrigeración por inmersión.
La compañía asiática confía en la refrigeración por inmersión como una tecnología clave pensada para los coches eléctricos, y principalmente para los que utilicen sistemas de carga rápida. Pero también para los vehículos pesados, como camiones, maquinaria agrícola o de minería.
El Immersio XM25 combina un pack de baterías con un sistema de gestión y un módulo de seguridad activa. Las celdas están totalmente rodeadas por un líquido refrigerante no conductor que fluye entre las celdas, realizándose la transferencia de calor sobre una superficie mucho menor.
Esto garantiza que la temperatura máxima de la batería descienda durante la carga, y que la temperatura general se distribuya de manera mucho más homogénea.
Con una mejor distribución de la temperatura, Xing Mobility dice que esto no solo permite cargas más rápidas, sino que también duplica la vida útil de la celda. Algo que supone mejorar el coste de propiedad del vehículo al lograr extender su vida operativa.
Otro aspecto positivo de este formato de refrigeración por inmersión es que los fabricantes podrán prescindir de muchos de los componentes usados ahora para disipar el calor o distribuir el aire o el líquido usado para contener la temperatura. Elementos habitualmente pesados y complejos, que permitirá aligerar el conjunto y sobre todo, abaratarlo en hasta un 30%. Todo manteniendo e incluso mejorando la capacidad térmica de la batería.
Una tecnología que abre las puertas no solo al desarrollo de baterías más duraderas y ligeras para coches eléctricos, sino que también puede ser una alternativa en sectores intensivos donde las potencia tanto de la salida de la batería como de la red de recarga sean muy elevadas, como autobuses, camiones, e incluso trenes o aviones eléctricos.
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