La carrera por la conducción autónoma está llevándose acabo fundamentalmente entre chinos y estadounidenses. El equivalente oriental a Google, Baidu, tiene su propia división de automóviles, Jidu Auto, que no solo fabricará coches eléctricos, también vehículos inteligentes. Sus objetivos apuntan maneras: 800.000 unidades con conducción autónoma para 2028.
Robin Li, director ejecutivo de Baidu, dijo: «Creemos que en materia de coches inteligentes ser eléctrico es estar en semifinales, y ser inteligente es la final», refiriéndose a Tesla. La producción en masa comenzará el año que viene. Su primer modelo fue anticipado por el Jidu Robo-01, presentado en junio en forma de prototipo (imagen de cabecera). Será prácticamente calcado al modelo de producción, su similitud ronda el 90%.
Este vehículo se puede controlar mediante la voz y ni siquiera tiene manetas en las puertas. Además, Baidu presentó en julio el Apollo RT6, con capacidad de conducción autónoma de nivel 4, cuyo volante puede estar oculto mientras no se necesite. El año que viene entrará en servicio dentro de Apollo Go, la división de la compañía de alquiler de coches con conductor robótico. Como un taxi, pero sin conductor humano.
Baidu ya acumula una experiencia de un millón de desplazamientos con Apollo Go, realizados con vehículos de primera generación, a lo largo de 10 ciudades chinas. Tantas pruebas han permitido que el Apollo RT6 tenga un historial de 32 millones de kilómetros recorridos en su sistema autónomo y su conducción sea equivalente a la de un experto con 20 años al volante.
En 2024 habrá otro modelo. Baidu aspira a comer terreno a las empresas tradicionales de VTC y ofrecer viajes significativamente más baratos en las áreas urbanas, ya que no habrá conductor al que pagar. También habrá un modelo de camión, anticipado por el prototipo Xingtu. Una de las principales diferencias tecnológicas de Baidu respecto a Tesla es el uso del LiDAR.
Mientras que los coches de Tesla ya lo confían todo al sistema Tesla Vision, a través de cámaras con visión computerizada, en China siguen pensando que es un error no apostar por el LiDAR para complementar las cámaras. De hecho, el Apollo RT6 viene con 12 cámaras de vídeo y ocho sensores LiDAR. Pero en la compañía de Elon Musk creen que es mejor delegar todo en cámaras, porque nosotros como humanos captamos el 90% de la información a través de la vista.