Probamos la Eleglide M2. ¿La mejor bici eléctrica relación calidad/precio del mercado?

Eleglide es un fabricante de bicicletas eléctricas y scooters eléctricos que se ha hecho un hueco en el mercado por sus equilibrados productos que combinan un buen nivel de calidad en materiales y construcción, unas prestaciones por encima de la media, y sobre todo, por ofrecer este conjunto con un precio muy ajustado. Ahora han lanzado un nuevo modelo, la Eleglide M2, que llega con pequeños pero muy importantes cambios respecto a la M1.

Lo primero que llama la atención y permite diferenciar las versiones, es el uso de una elegante pintura negra para el cuadro. Un cuadro de aluminio donde no hay alternativa de seleccionar otro tono. Además, la M2 viene en un solo tamaño, que corresponde a una talla M.

Eleglide M2: Entrega de la bici en casa

Como el resto de modelos, Eleglide envía la bici a nuestra vivienda, y solamente tenemos que ocuparnos de terminar el montaje. Una operación bastante sencilla. Solamente tendremos que montar los pedales, el sillín, la luz delantera, el manillar y la rueda delantera. Todos los tornillos y las herramientas necesarias se incluyen con la bicicleta.

Los pasos son fáciles de completar. Sin embargo siempre hay cosas a mejorar, por ejemplo la colocación del manillar tiene ciertas complicaciones ya que no hay una marca que nos indique la posición correcta, por lo que tendremos que afinar la vista, o hacer nosotros la marca midiendo previamente las distancias. También está la cuestión de la rueda delantera, la parte más compleja, ya que no siempre es fácil colocarla correctamente para que no roce con el freno de disco.

Por lo demás, los neumáticos vienen hinchados al 50%, por lo que si no tenemos un bombín en casa podremos salir con la bici y acercarnos a una gasolinera o a una tienda a comprar el propio bombín. La batería por su parte viene cargada, por lo que en pocos minutos estaremos listos para hacer una ruta.

Dentro de los accesorios que vienen en el envío está el acelerador. Este accesorio es ilegal para las bicis que circulan por la vía pública, pero que si puede montarse para aquellas que vayan a ser usadas en recintos privados. Un absurdo normativo que no tiene ningún sentido y que limita el uso de este tipo de bicis a personas con algún problema de movilidad.

Eleglide M2: Equipamiento

 

A pesar de ser un modelo de bajo coste, Eleglide no renuncia a componentes de marcas conocidas, y en el caso de la M2 nos encontramos con muchos componentes de Shimano, por ejemplo. Sin embargo, no son de la serie actual, sino que se lanzaron hace unos años. Por lo tanto, son elementos perfectamente funcionales, pero de otra temporada, lo que le permite acceder a un conjunto más barato.

Otro aspecto llamativo es que Eleglide opta por un sistema de cambio de tres platos. Algo poco habitual en las bicis eléctricas que suelen optar por un sólo plato. En este caso son 24 marchas las disponibles, lo que en la práctica supone que si no contamos con batería, podremos usar la bici como un modelo convencional.

En cuanto a los frenos, en este caso nos encontramos con un sistema de doble freno de discos hidráulicos de 160 mm procedentes del fabricante chino XOD. Estos funcionan con aceite mineral y tienen un sensor eléctrico que corta el aporte del motor cuando pulsamos uno de ellos. 

El motor de la Eleglide M2 ​​está instalado en el buje de la rueda trasera. Tiene una potencia nominal de 250W y un par máximo de 55 Nm. Como marca la norma, este nos apoya hasta los 25 km/h y su respuesta al pedaleo es bastante rápida.

La batería por su parte es un pack extraíble de 36 V y 15 Ah (540 Wh). Una batería que se puede bloquear mediante un botón, y también se puede extraer fácilmente, por si queremos cargarla en casa o en la oficina sin tener que subir la bici al completo. 

Como es habitual, contamos con una pantalla donde controlar aspectos como el nivel de carga, velocidad máxima, kilómetros recorridos. Un panel monocromático de 1,75 pulgadas situado en el manillar junto a la empuñadura izquierda, donde también encontramos los botones para seleccionar el nivel de apoyo del motor, hasta cinco niveles, así como el botón para encender la luz delantera.

Un pequeño faro LED que se alimenta de la batería, pero que por desgracia no se acompaña por un segundo faro en la parte trasera, que Eleglide soluciona con un simple reflector.

La M2 monta una suspensión delantera con 100 milímetros de recorrido. Una horquilla no está sostenida por presión de aire, sino que funciona de forma puramente mecánica con resortes. La precarga se puede ajustar con un dial en la parte superior. En el otro brazo de la horquilla se encuentra una palanca para bloquearla.

Un modelo que cuenta con llantas de 27,5 pulgadas que monta neumáticos de marca de Kenda. Los Kenda Aptor son neumáticos que ofrecen un perfil de mountain bike moderado, que le permiten ofrecer un rendimiento compensado tanto si vamos a movernos por caminos de monte, o por la ciudad.

Una de las novedades de la Eleglide M2 es que esta ​​se puede conectar a nuestro smartphone mediante Bluetooth y su correspondiente aplicación. Esta nos abre algunas opciones de configuración.

Resulta algo confuso que se solicite una contraseña tanto para la aplicación como para la conexión Bluetooth, pero las contraseñas no son idénticas. Si bien la contraseña de la aplicación se puede elegir libremente cuando nos damos de alta, la del Bluetooth tendremos que adivinarla para completar la conexión. La respuesta son seis ceros seguidos.

Una vez pasado este trámite, la app nos muestra info como la velocidad actual, el contador parcial, el kilometraje total, el nivel de soporte del motor y el estado de las luces.

En la configuración, Eleglide ofrece cierta personalización. Por ejemplo, se puede cambiar la velocidad máxima del motor. De fábrica, el interruptor está ajustado a 25 km/h, pero esta velocidad se puede reducir o aumentar hasta 32 km/h. Eso si, si hacemos esto, entonces no podremos circular legalmente por las vías públicas.

Además, las unidades o el brillo de la pantalla se pueden ajustar a través de la aplicación. También se puede configurar un bloqueo de pantalla como una característica de seguridad adicional, lo que en la práctica supone que podremos añadir un código para encender el sistema eléctrico de la bicicleta.

En marcha, la Eleglide M2 nos recuerda que estamos ante un modelo de bajo coste, con componentes de otra era. Algo que no tiene por que ser malo, aunque sí tiene su efecto en una experiencia en aspectos como la operación de hacer un cambio de marcha, que se alarga más de lo que estamos acostumbrados en las bicis más modernas.

Asimismo, los frenos de disco hidráulicos funcionan de manera fiable. El punto de presión del sistema es algo esponjoso pero está bien. Sin embargo, lo que le falta por completo al sistema es algo parecido a la deportividad. Lo mismo para la suspensión, que sigue siendo bastante blanda incluso con precarga máxima. Por el contrario, el bloqueo tiene un muy buen funcionamiento y elimina los balanceos cuando afrontamos una pendiente de subida.

En marcha echamos en falta un sensor de par al pedaleo. Esto nos obliga a tener que jugar con los modos de conducción para adaptarlo a cada situación. De nuevo, esto nos recuerda que renunciamos a muchos aspectos de las bicis modernas en favor de un coste más reducido.

La conducción es impecable incluso a altas velocidades: no hay vibraciones ni golpes en el manillar. Por supuesto, la M2 no es un modelo para hacer descensos ni exigirle un gran rendimiento, y está pensada para unos recorridos tranquilos como en una excursión o desplazamientos ocasionales.

Eleglide M2: autonomía y precio

 

 

La autonomía es también uno de sus puntos más favorables. Sus 15 Ah nos ofrecen según el fabricante 125 kilómetros con una sola carga.

Como suele ser habitual, estas cifras son muy relativas, y habitualmente muy optimistas. Durante nuestras pruebas hemos superado los 70 kilómetros siempre con el máximo apoyo del motor y el mínimo esfuerzo por nuestra parte. Y finalizando el recorrido siempre con uno o dos puntos todavía en la batería, por lo que podemos pensar que con una carga completa en situación real no deberíamos tener problema para llegar a los 80 km.

La conclusión es que, una vez más, Eleglide nos ofrece una bici eléctrica muy compensada y con una relación calidad/precio más que destacable. Un modelo que no cuenta con un diseño muy moderno, con la batería a la vista, pero que está pensada para los que busquen una bici para dar paseos esporádicos sin grandes exigencias mecánicas, y hacerlos sin gastar demasiado dinero.

Una bici que podemos comprar directamente en la web del fabricante, con un precio de 899 euros, que podremos rebajar en 50 euros usando el cupón FCE50, y que en unos pocos días nos llegará a casa desde su almacén europeo.

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