No corren buenos tiempos para la planta de Volkswagen en Zwickau, Alemania. Si hace unas semanas nos hacíamos eco de que la escasez de motores eléctricos obligaría a detener temporalmente la producción de los ID.4, ID.5 y Audi Q4 e-tron, ahora se ha sabido que la compañía se verá obligada a reducir el número de turnos en la cadena de los ID.3 y CUPRA Born debido a su baja demanda.
«La decisión garantiza un funcionamiento productivo y la viabilidad futura del sitio», ha señalado un portavoz de la empresa. A partir de ahora, los dos compactos basados en la plataforma MEB se fabricarán en dos turnos en lugar de tres. Aparentemente, el reciente restyling del que se ha beneficiado el ID.3 no ha sido suficiente para reactivar las ventas.
La desaceleración generalizada se explica por varios motivos: la inflación, la subida de los tipos de interés, la todavía escasa infraestructura de carga… El tiempo de los early adopters ya ha pasado, y muchos clientes simplemente están esperando la llegada de modelos más competitivos en térmicos de precio y autonomía. Los expertos pronostican que la demanda seguirá siendo débil durante los próximos dos años.
Con un precio de partida de 42.750 euros en nuestro mercado, lo cierto es que el Volkswagen ID.3 se sitúa como el compacto eléctrico más costoso del panorama, por encima de sus rivales chinos (BYD Dolphin, MG4 Electric) y franceses (Peugeot E-308, Renault Mégane E-TECH). Curiosamente, el CUPRA Born resulta algo más barato (38.210 euros).
Las ventas del CUPRA Born han aumentado en un 84,3% durante los nueve primeros meses del año
Volkswagen ha visto como su cartera de pedidos de coches eléctricos en Europa se reducía a la mitad de un año para otro. Resulta interesante señalar que, con unas ventas de 32.300 unidades durante los primeros nueve meses del año, los registros del CUPRA Born se han incrementado en un 84,3% interanual, lo que nos lleva a pensar que el problema radica en el ID.3.
Actualmente, Europa se constituye como el principal mercado para los eléctricos de Volkswagen, representando un 64% de su volumen total. Debido a la menor demanda, el grupo se ha visto obligado a rebajar sus objetivos: aunque se esperaba que los eléctricos a baterías representaran el 11% de sus ventas para principios de 2024, finalmente se situarán entre el 8 y el 10%.
Fuente | Automotive News Europe
