BYD lanza unas baterías de sodio para almacenamiento estacionario
BYD ha presentado unas baterías de sodio que se posicionarán como una alternativa más económica y sostenible a las baterías de litio, principalmente como sistema de respaldo de la red eléctrica.
BYD ha presentado unas prometedoras baterías de iones de sodio, que se posicionan como una excelente alternativa como respaldo a las redes eléctricas y las energías renovables. Unas celdas que destacan por su larga vida útil, su baja huella ambiental, y su coste más reducido.
Según Kai Wang de BYD, el contenedor MC Cube-SIB ESS es la primera batería de sodio de alto rendimiento del mundo para el almacenamiento estacionario. Un sistema construido con una nueva arquitectura que usa el formato de cuchilla (Blade) pero aplicado a sistemas de grandes dimensiones.
El sistema diseñado por BYD tiene una capacidad de 2,3 MWh y su voltaje puede oscilar entre 800 V y 1400 V, con un nominal de 1.200V.
A modo de comparación, el Megapack de Tesla viene con una capacidad de 3,9 MWh, pero está hecho de baterías LFP.
Esto nos muestra que el sodio es una alternativa prometedora, principalmente en aplicaciones como el almacenamiento de red, ya que su densidad energética es menor que las de litio.
Por ejemplo, el modelo de BYD, está instalado en un contenedor marítimo de 6 metros. Esto supone mucha menos capacidad que los 5 MWh y más que ofrecen las baterías BESS de iones de litio de la competencia. Sin embargo, esto es un problema menor en este mercado, donde el espacio y el peso no son críticos como en los vehículos.
Su principal punto a favor es su menor coste. Las baterías de iones de sodio son mucho más baratas porque su materia prima es abundante y pueden ofrecer una vida útil más larga. Además, cuentan con un mejor rendimiento en climas fríos, lo que le permite poder trabajar con eficiencia en un amplio rango de temperaturas y ambientes, además de ser más fáciles de reciclar llegado el momento.
Unas celdas que saldrán de la nueva fábrica que está preparando BYD, situada en la localidad de Xuzhou, que será la más grande del mundo de su clase, y que contará con capacidad para producir 30 GWh al año una vez esté plenamente operativa.
Esta apuesta de BYD ayudará a acelerar la inversión en un tipo de baterías que es clave para la descarbonización del transporte, pero también la eliminación paulatina de las fuentes de energía fósiles, permitiendo sacar el máximo partido a las renovables, con el impacto en reducción de emisiones y logrando un menor coste de la electricidad.
Un sodio donde España puede ser una potencia de futuro gracias a su amplia instalación de desaladoras, que pueden ser la fábrica de la materia prima de las baterías del mañana.
Gracias HeffeQue por el aviso
Fuente | Energy Storage