
Bosch presenta un sistema eléctrico de 800 voltios para maquinaria agrícola
Bosch lanza una nueva solución eléctrica que permitirá diseñar una alternativa a los sistemas diésel tradicionales en el campo. Más eficiente, más potente y adaptable a distintas plataformas para facilitar la necesaria transformación de un sector clave.

Bosch ha aprovechado la feria Agritechnica 2025 para mostrar una de sus últimas apuestas en electrificación: un nuevo sistema de propulsión eléctrica de 800 voltios diseñado específicamente para maquinaria agrícola. Se trata de una solución pensada tanto para vehículos 100% eléctricos como para aquellos que combinan motor térmico y eléctrico en configuraciones híbridas.
Este nuevo sistema gira en torno al motor eléctrico Bosch SMG230, que trabaja con voltajes entre los 400 y los 850 voltios. Entrega una potencia continua de hasta 188 kW (unos 255 CV) con un par motor sostenido de 250 Nm, aunque es capaz de alcanzar picos de 550 Nm durante periodos cortos. Todo ello con un diseño que busca maximizar la eficiencia energética y la densidad de potencia, dos claves fundamentales para este tipo de aplicaciones en el entorno agrícola.
Más potencia, menos peso y mayor eficiencia

Una de las grandes ventajas de esta arquitectura de 800 voltios es su capacidad para aumentar la potencia sin penalizar el peso. Según Bosch, el sistema puede ofrecer hasta 80 kW más que una configuración similar de 400 voltios manteniendo el mismo peso. O, si se prefiere, reducir el peso en una aplicación equivalente sin renunciar al rendimiento.
Otro punto destacado es el inversor que acompaña al motor, el cual emplea semiconductores de carburo de silicio. Esta tecnología permite conmutaciones más rápidas y menos pérdidas de energía en forma de calor. El resultado es una eficiencia por encima del 99%, algo clave en vehículos que operan durante largas jornadas y bajo condiciones exigentes.
Además, el sistema ha sido desarrollado bajo los estándares de seguridad y diagnóstico propios del mundo del automóvil. Bosch no solo suministra el hardware, sino que también ofrece soporte para la integración en plataformas ya existentes, así como asistencia en el desarrollo de aplicaciones concretas para cada tipo de vehículo agrícola.

La solución no se limita a tractores pequeños o medianos de propulsión eléctrica. También puede ser parte de una configuración híbrida en maquinaria pesada, lo que abre la puerta a una electrificación progresiva en distintos segmentos del sector.
Complementariamente, Bosch propone combinar este sistema con soluciones de transmisión como la caja de cambios coaxial eGFV9120 de Bosch Rexroth, también presente en Agritechnica. Esta sinergia permite una optimización aún mayor del conjunto, mejorando la eficiencia global del vehículo y reduciendo los costes operativos.
“La nueva solución de electrificación combina una gran densidad de potencia, dimensiones compactas y un nivel óptimo de eficiencia. Su flexibilidad la convierte en una opción ideal para electrificar cualquier tipo de maquinaria agrícola”, ha afirmado Philip Kurek, responsable del área off-highway y soluciones marítimas en Bosch Engineering.
Un paso importante de uno de los mayores suministradores del mundo, que pone sobre la mesa la urgente necesidad de empezar la transición energética también en el campo, peligrosamente dependiente de los combustibles fósiles, lo que se traduce en que nuestra cesta de la compra también está expuesta a lo que decidan los países productores de petróleo. Algo extremadamente arriesgado, y hasta cierto punto irresponsable, sobre todo si existen alternativas técnicas viables y tenemos una producción creciente de energías renovables.
Fuente | Bosch


