Un nuevo vídeo nos permite ver el sistema de conducción autónoma de Tesla en la vida real. Ciudado con las rotondas, y con la policia

Un nuevo vídeo nos permite ver el sistema de conducción autónoma de Tesla en la vida real. Ciudado con las rotondas, y con la policia

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Publicado: 19/10/2015 11:31

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Los chicos de DragTimes han publicado un nuevo vídeo donde nos enseñan como funciona en condiciones de tráfico real el sistema de conducción autónoma de Tesla.

En esta ocasión podemos ver como el conductor habilita el sistema en una zona de doble dirección, con tráfico en ambos sentidos, y con elementos tan populares a este lado del Atlántico como son las rotondas, con mucha menos presencia en aquél mercado.

Precisamente en la rotonda el conductor ha tenido que tomar el control del vehículo, dado que al menos de momento los Model S y Model X dotados de este sistema no pueden gestionar estas zonas.

Después de salir de la rotonda, el conductor se ha dirigido al hábitat natural de este sistema, la autovía, donde descubrimos algunos detalles. El conductor ha circulado a 120 km/h, que es una velocidad por encima del límite legal de 96 km/h y que le ha valido ya alguna multa.

Además también vemos que la distancia con el coche que nos precede dependerá de la velocidad a la que estemos circulando, cuando más alta, más distancia. Una distancia que el propio coche podrá gestionar de forma automática, para adaptarse por ejemplo a una situación de tráfico congestionado, como cuando llegamos a la zona de pago de las autopistas de peaje.

Otra cosa que nos ha llamado la atención es el proceso de adelantamiento. Como habíamos visto, el conductor tendrá que habilitar el proceso de forma manual, presionando el tirador del intermitente. Pero vemos como en este caso debe hacerlo dos veces. Puede que la distancia para proceder a adelantar tenga un límite determinado.

La conclusión para el conductor es que se trata de un sistema realmente impresionante, que a los pocos minutos te acostumbras y dejas atrás la tensión de los primeros kilómetros. Echamos en falta que sea capaz de leer las señales de tráfico, y adaptar su velocidad a los límites de cada vía. Algo que en lugares como Estados Unidos, con unas velocidades máxima incluso más bajas que en España, puede resultar de gran ayuda para evitar sorpresas.

Vídeo | Youtube