¿Quieres estar informado diariamente con las últimas novedades del mundo del motor?

Ahora no Permitir

BMW invertirá 1.000 millones de euros para levantar una fábrica de coches eléctricos en Hungría

BMW ha confirmado que están preparando la inversión necesaria para poner en marcha una nueva fábrica. Una instalación que se situará en la localidad húngara de Debrecen, y que contará con espacio para la producción de coches eléctricos, así como también acoger de forma paralela la de modelos convencionales.

En total se estima que la inversión llegará a los 1.000 millones de euros. Una cantidad que permitirá a los alemanes poder levantar una planta que esperan logre una capacidad de 150.000 unidades al año, y de esa forma atender la demanda de modelos en Europa. Un mercado donde BMW matricula el 45% de sus ventas a nivel mundial.

De momento no hay detalles de las fechas de inicio de la actividad de una planta que llegará de forma paralela a la inversión realizada por BMW para la compra de baterías al desarrollador chino CATL. Una empresa que prepara su propia instalación en Alemania, y que recibirá una importante dotación precisamente por parte de una BMW que se convertirá en cliente preferente.

Gracias a su nueva fábrica, BMW logrará incrementar la producción de unos vehículos que cuentan con cada día más ventas. Como ejemplo el la estadística que nos indica que durante los cinco primeros meses del año los coches eléctricos e híbridos enchufables han ocupado un 4.7% de las ventas dentro de BMW. Esto supone que entre la división “i”, BMW iPerformance y MINI, han llegado a las 46.849 unidades entre enero y mayo, lo que representa un crecimiento del 41% respecto al mismo periodo del 2017.

Y eso a pesar de no recibir grandes novedades a nivel técnico, siendo la renovación del i3 de finales de este año la única gran noticia dentro de la marca germana.

Pero a la vista de la situación, parece que BMW ha comprendido que estamos en una tendencia sin vuelta atrás, y de esa forma han comenzado con bastante reticencia a realizar las inversiones necesarias para atender una demanda que no dejará de crecer en los próximos años, y que amenaza con irse a otras marcas si los alemanes no se ponen las pilas.

No es que 1.000 millones se euros sea una barbaridad, pero al menos es una señal de que algo se mueve dentro de los gigantes alemanes, que poco a poco están engrasando la maquinaria eléctrica.

Vía | Reuters

Compártelo: Compartir en WhatsApp Compartir en Menéame