La imagen de Volkswagen quedó seriamente tocada después del escándalo del dieselgate. A pesar de los esfuerzos de la marca por dejar atrás esa imagen anunciando la nueva gama ID de coches eléctricos, se sigue viendo a Volkswagen con muy mala imagen. Y en las oficinas del fabricante lo saben. De hecho, el jefe de VW, Herbert Diess, difícilmente puede ocultar su expresión de desacuerdo cuando se le pregunta por esto.
En pleno debate sobre las prohibiciones de los motores diésel en las grandes ciudades debido, principalmente, a las partículas y a los óxidos de nitrógeno que emiten, el CEO de Volkswagen afirmó que «todavía falta por concretar qué responsabilidad tenemos nosotros. Aún así, el debate generado respecto a este tema lo encuentro demasiado emocional«.
Posteriormente, se refirió al tema de la actualización del software de emisiones de la siguiente manera: «Si hay soluciones legales adecuadas, VW participará en ellas si el cliente lo desea. Nuestra empresa está dispuesta a asumir un coste del 80% de la actualización«. Por otro lado, el Ministro de Cancillería, Helge Braun (CDU), confirmó que «existe un claro convencimiento por parte del gobierno de que los propietarios de los vehículos afectados no deben asumir ningún coste«.
Como respuesta a las preguntas del Comité de Transportes del Bundestag, Herbert Diess contestó que «hemos invertido 30 mil millones en desarollar nuestra gama de vehículos eléctricos, hemos adaptado la fábrica de Zwickau a la fabricación de estos coches y estamos construyendo una fábrica de eléctricos en Shanghai«. Además, afirmó que «en 2020 tendremos vehículos que pueden hacer sombra a Tesla por la mitad de precio«.
El CEO de VW continuó diciendo que «en 2019-2020 llegarán vehículos verdaderamente atractivos, lo que será una alternativa para muchos clientes en términos de precio, rendimiento, autonomía y capacidad de carga de las baterías«. Se espera que en 2020 la producción de vehículos eléctricos tenga una cadencia de 1.500 unidades al día. Los primeros modelos de la nueva gama ID estarán listos en la planta de Zwickau desde finales de 2019, tal y como afirmó el Director de Finanzas de Volkswagen, Frank Witter.
Actualmente se fabrican en esta planta los Golf y Golf Variant, y los planes de VW pasan por aumentar la capacidad de la fábrica con nuevos modelos eléctricos. Se espera que la cuota de mercado de eléctricos del grupo alcance el 20-25%, gracias en su mayoría al mercado chino. Para abastecer la futura demanda, en 2020 se inaugurará una planta en Shanghai para la producción de coches totalmente eléctricos. Por último, en los planes futuros de la marca están la de ofrecer puntos de carga propios y una tarifa eléctrica para usuarios de VW.
Vía | Stern.de
