Son muchos los usuarios europeos que están esperando nuevas propuestas de coches eléctricos capaces de llevar un remolque. Una opción que hasta ahora se había limitado a unas opciones muy limitadas, como el Tesla Model X, más recientemente el Model 3, y el Audi etron. Pero nada en la zona media-baja de la oferta a nivel de precios.
Para algunos una esperanza era que el KIA Niro eléctrico contase con esta opción. Y es que el SUV coreano cuenta con elementos como un sistema de propulsión solvente, 150 kW (204 CV) que le deberían permitir arrastrar carga sin demasiados problemas. Algo que se añade a una batería que llega a los 64 kWh, que permite realizar desplazamientos moderadamente largos incluso con carga.
Por desgracia esta posibilidad se ha desvanecido. KIA ha confirmado en Noruega que el Niro eléctrico, así como el nuevo Soul, no podrán llevar bola de remolque. Así se lo ha transmitido a sus clientes a los que ha indicado que después de una larga serie de pruebas han decidido no incluir esta opción debido a que no logra cumplir con los elevados niveles de exigencia de la marca.
Este imprevisto ensombrece un desembarco que se esperaba de lo más exitoso para un modelo que lo tenía todo para triunfar. Pero no han sido fáciles los inicios debido en un primer momento a un fallo en el proceso de homologación de la autonomía, que le hizo recortar las estimaciones de los 485 kilómetros WLTP iniciales, a unos también impresionantes 455 kilómetros.
Pero el gran impedimento de este modelo para lograr mayores volúmenes de venta está en su baja capacidad de producción. Es muy complicado hacerse con una unidad, sobre todo si se realiza un pedido personalizado. Algo que provoca esperas de entre seis y nueve meses hasta recibir el vehículo. Sin duda un freno enorme que según los rumores no mejorará en 2020, donde no se espera un gran incremento de la producción y donde este modelo se enfrentará a nuevos competidores.
Un Niro eléctrico que hasta el mes de junio había entregado en toda Europa apenas 6.162 unidades. Algo que supone casi la mitad que su hermano, el Hyundai Kona eléctrico. Un aspecto que nos indica que el grupo está reforzando más la producción del Kona que la del Niro, lo que anticipa que por desgracia, la espera por el eNiro seguirá siendo extremadamente larga.
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Fuente | DS
