A finales de este año veremos el inicio de la producción del segundo miembro de la familia de coches eléctricos ID de Volkswagen. Hablamos del ID.4, que se ha convertido en una de las prioridades para el fabricante alemán ante el fuerte empuje que los SUV están teniendo en el mercado. Pero el proyecto del «4» parece que irá mucho más allá, y además de una versión deportiva, GTX, VW también prepara una variante más bruta y pensada para los que quieran un todoterreno de verdad.
Según fuentes internas, el Volkswagen ID Ruggdzz (nombre provisional) aprovechará la flexibilidad de la plataforma MEB de Volkswagen, para sin grandes inversiones poner en el mercado un modelo diferente. Una propuesta que deja atrás el aspecto de SUV urbano, adoptando una imagen más campera y pensado para los que realmente salen alguna vez del asfalto con su vehículo y quieran sacar el máximo partido a su configuración 4×4.
El sistema de propulsión que usará será el mismo que el resto de familia ID, con tracción a las cuatro ruedas y posibilidad de enviar de forma individual la potencia a cada rueda. Algo muy interesante para los que se aventuren por zonas complicadas con su vehículo. En cuanto a la batería, de momento es muy pronto para hablar de este aspecto, pero al tratarse de un vehículo de estas características es de esperar que la versión base sea la dotada del pack de 77 kWh útiles, y posiblemente exista una por encima de cerca de 100 kWh.
Uno de los principales cambios será el estético, con un frontal donde destacará una parrilla de ancho completo que incorpora faros rectangulares, un capó casi horizontal, parabrisas vertical, una línea de techo casi plana y elementos diferenciadores como un pilar C transparente, que permitirá mejorar la visibilidad para el conductor. Todo en un cuerpo algo mas compacto que el propio ID.4, y cuyas medidas se situarán unos 10 centímetros por detrás el mismo dejando la cifra en los 4.6 metros de largo.
La versión inicial tendrá espacio para cinco ocupantes. Pero sobre la mesa hay la opción de añadir una segunda versión algo más larga, que permita ampliar el número de asientos hasta los siete. Una variante que parece destinada a los mercados de China y Estados Unidos, donde son más apreciados estos modelos, pero que no se descarta también se venda en Europa.
Un nuevo proyecto que se abrirá a las múltiples posibilidades de configuración que le permite gozar la plataforma MEB, y que comenzará según los rumores con un primer modelo que comenzará su fabricación en 2023, casi al mismo tiempo que el microbus ID.Buzz, o ID.7 como parece será denominado finalmente.
Un movimiento inesperado y que abre nuevas posibilidades a los clientes que quieran dar el salto a un coche eléctrico, y que en apenas tres años tendrán ante si una oferta de lo más variada.
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