CATL, el mayor fabricante de baterías para coches eléctricos del mundo, está estudiando la posibilidad de levantar una tercera gigafábrica de baterías en Europa. Esta información ha sido confirmada por el presidente de la compañía china en el viejo continente, Matthias Zentgraf. «Estamos pensando en ello, pero actualmente no hay una decisión clara».
La primera planta europea de CATL se sitúa en Erfurt (Alemania) y comenzará a operar a finales de año. Zentgraf ha anunciado la creación de planes de contingencia para mantenerla en funcionamiento durante el invierno a pesar de la complicada situación del mercado energético (problemas de suministro, precios elevados, etc).
«Nos afecta la escasez de gas natural, que es muy importante para el proceso de producción de celdas porque necesitamos mucha energía. Estamos trabajando intensamente en sustitutos. Ya tenemos una idea muy, muy prometedora para reemplazar el gas natural para comprar energías renovables».
La segunda planta de CATL se levantará en Hungría en colaboración con Mercedes-Benz y supondrá una inversión de 7.300 millones de euros. Estas instalaciones tendrán una capacidad anual de 100 GWh (la cual se alcanzará dentro de aproximadamente cinco años) y también suministrarán baterías a BMW, Stellantis y Volkswagen.
CATL también construirá nuevas plantas en Norteamérica
«No construiremos una tercera planta si no hay perspectivas para el volumen de demanda». Actualmente, CATL también está buscando ubicaciones en Norteamérica para esquivar las nuevas regulaciones de Estados Unidos, que excluirá de los planes de ayudas a aquellos coches eléctricos cuyas baterías no hayan sido fabricadas en dicho país, en Canadá o en México.
CATL se encuentra en plena rampa de lanzamiento de nuevas soluciones como las celas LMFP (que combinan las ventajas de las NCM y las LFP) o las baterías Qilin, las cuales logran un aprovechamiento del espacio del 72%. Además, el año que viene comenzará a fabricar sus primeras baterías de sodio.
Por otro lado, BMW ha confirmado que CATL será uno de los dos proveedores encargados de producir sus nuevas celdas cilíndricas de sexta generación, las cuales han sido desarrolladas internamente por la firma bávara. Estas baterías, que permitirán a BMW lanzar coches eléctricos con hasta un 30% más de autonomía (llegando a los 1.000 km WLTP), debutarán con la plataforma Neue Klasse a mediados de la década.
Fuente | Automotive News Europe
