¿Quieres estar informado diariamente con las últimas novedades del mundo del motor?

Ahora no Permitir

¿Cuánto almacenamiento necesitaríamos para un sistema 100% renovable?

En los últimos años las discusiones sobre el camino hacia un sistema eléctrico 100% renovable se ha centrado en cómo cubriremos las intermitencias de las fuentes limpias, y como podremos prescindir del gas, carbón y nuclear. La respuesta es con almacenamiento, que puede llegar de diversas formas. Baterías, bombeo hidráulico…etc. Ahora, desde Australia nos llega una estimación que nos indica cuánto respaldo necesitaría un país para lograr acercarse lo máximo posible a ese 100% renovable.

Por supuesto cada país es un mundo, y el reto será más o menos complejo según haya sido la apuesta por las renovables en el pasado, y como se ha diseñado el sistema del futuro. Pero Australia a pesar de tener una población menor que España, 26 millones de habitantes, su consumo eléctrico ha sido incluso superior, con 246.000 GWh en 2021, por los 242.000 de España.

Pero el gobierno australiano ha dado un giro importante en sus políticas, hasta ahora muy centradas en el carbón, por ser uno de los principales productores del mundo, y se ha lanzado a una carrera por apoyar el despliegue de renovables y baterías. Algo que les ha permitido rozar el 40% de producción renovable en 2022, un 37% más que el año anterior cuando cerraron con el 29.1%, y que le colocan de nuevo a la altura de España que ha cerrado el 2022 con un 42% de producción renovable.

¿Cuánto almacenamiento necesitaríamos para un sistema 100% renovable?

Pero la pregunta es cuánto almacenamiento necesitaremos para un sistema renovable, y también cuánto nos costará.

David Osmond es un ingeniero del sector eólico apasionado por las energías renovables, los vehículos eléctricos, la eficiencia, que ha realizado un estudio de las necesidades de almacenamiento de Australia para lograr ser 100% renovable.

Para saberlo, David ha realizado una simulación de la red eléctrica principal de Australia utilizando datos de generación reescalados, que demuestran que puede acercarse mucho al 100% de producción renovable con solo 5 horas de almacenamiento, lo que supondría desplegar respaldo con una potencia de  24 GW y una capacidad de 120 GWh.

Esto se podría lograr mediante una mezcla de muchas formas de almacenamiento. Desde hidroeléctrica de bombeo, donde Australia ya tiene 22 GWh actualmente, almacenamiento de servicios públicos, almacenamiento de baterías residenciales/comunitarias, hasta almacenamiento en baterías de vehículos eléctricos usando tecnología V2G.

No parece un reto tan complejo, y por ejemplo Australia ya está realizando proyectos individuales de baterías de 1.000 MWh. Cifra que podemos comparar con la más famosa de todas, la batería de Tesla en Hornsdale, que como recordamos se queda en «apenas» 179 MWh. Algo que nos da un aviso de lo mucho que está avanzando el sector en apenas cuatro años desde la activación de la batería de Tesla.

El coste tampoco parece demasiado elevado, y según las estimaciones de David, solamente usando baterías para cubrir esos 120 GWh supondría una inversión según los costes actuales de 36.000 millones de dólares, o unos 3.600 millones de dólares al año en los próximos 10 años.

Estimaciones donde no se añaden el hueco que están cubriendo las instalaciones de baterías residenciales, que han alcanzado una velocidad de instalación de 1 GWh al año en Australia. Algo que ayudará a reducir el consumo y los picos de demanda desde el sector residencial, y que permitirá destinar más producción limpia a industria y zonas urbanas.

El resultado sería un sistema más limpio, pero también con unos costes del MWh más estables y económicos, no tan dependientes de factores geopolíticos como lo son el gas o el petróleo.

¿Es posible un sistema 100% renovable? Pues como vemos, los números sobre el papel así lo indican, o al menos nos avisan de que con la correspondiente inversión podremos acercarnos bastante en los próximos años lo que reducirá la dependencia de fuentes sucias como el gas y el carbón, mientras que vamos sustituyendo la nuclear que va terminando su vida útil.

Compártelo: Compartir en WhatsApp Compartir en Menéame