Un estudio de la Universidad sueca de Chalmers ha determinado que los camiones pesados eléctricos tienen la capacidad de ser más rentables para las empresas que los tradicionales de motor diésel. Te contamos cómo han llegado a esa conclusión.
Tradicionalmente, la electrificación de vehículos pesados utilizados para el transporte de carga a largas distancias no se ha considerado rentable.
Sin embargo, un nuevo estudio realizado por investigadores de la Universidad Tecnológica de Chalmers, en Suecia, ha revelado resultados sorprendentes: la electricidad puede ser una alternativa más económica que el diésel para este tipo de vehículos.
Para llegar a dicha conclusión, los investigadores llevaron a cabo este estudio utilizando datos de una empresa de transporte en la ciudad de Helsingborg (Suecia), seleccionada debido a sus tareas y condiciones operativas típicas de un negocio de transporte de larga distancia.
Los investigadores analizaron un escenario específico en el que los vehículos pesados recorrían una distancia de 553 kilómetros entre Helsingborg y Estocolmo. Compararon dos tamaños de baterías diferentes y dos precios posibles para la carga rápida. Y los resultados fueron prometedores, ya que la operación con electricidad resultó ser rentable para la empresa de transporte del estudio.
Determinando el tamaño óptimo de la batería
Uno de los aspectos clave del estudio fue determinar el tamaño más adecuado de la batería, ya que de ello dependía garantizar la rentabilidad de la electrificación de vehículos pesados.
Los investigadores encontraron que el tamaño de la batería adecuado dependía del tipo de carga transportada. Para cargas ligeras, como paquetes o verduras, una batería más grande no era necesaria y no restringía significativamente la capacidad de carga del vehículo.
Sin embargo, para cargas más pesadas, como bebidas o madera, una batería más pequeña requería carga rápida en la carretera. Otros factores importantes a considerar fueron los patrones de conducción y el precio de la carga rápida, aunque el estudio concluye que con la capacidad de batería adecuada, es posible cargar siempre en el centro logístico.
Inversión y viabilidad a largo plazo
Si bien invertir en baterías y equipos de carga tiene un coste inicial, los investigadores demostraron que la inversión merece la pena a largo plazo.
En un estudio anterior, se determinó que una batería de vehículo pesado eléctrico debe cargarse y descargarse al menos 1400 veces para que la inversión sea rentable. A lo largo de la vida útil de la mayoría de los vehículos comerciales, este umbral se supera fácilmente.
Esto indica que la electrificación de vehículos pesados puede ser financieramente viable y ofrece un incentivo adicional para que las empresas de transporte realicen la transición hacia vehículos eléctricos.
Anders Grauers, profesor asociado del Departamento de Ingeniería Eléctrica de Chalmers, afirma haber «demostrado que una flota de vehículos pesados se puede electrificar de manera rentable».
«Esto debería motivar a las empresas a invertir en esta transición. Los incentivos financieros suelen permitir cambios rápidos, y nuestro estudio refleja escenarios realistas para muchas operaciones de transporte», ha ampliado.
Datos tenidos en cuenta en el estudio
Es esencial tener en cuenta los aspectos económicos al evaluar la viabilidad de la electrificación de vehículos pesados.
En el estudio, se estableció un precio de 1,20 euros por litro de diésel y 0,17 euros por kWh para la carga rápida eléctrica. Estos precios, sin incluir el IVA, fueron utilizados como referencia para comparar los costes entre el diésel y la electricidad. Otros costes, como el mantenimiento, se asumieron iguales para ambos tipos de vehículos.
El modelo utilizado en este estudio se basa en datos de una empresa de transporte operativa, lo que lo hace más relevante y aplicable a situaciones del mundo real. Aunque se asumió un precio bajo para el diésel, el estudio concluyó que la electrificación de la flota de vehículos pesados es rentable para la mayoría de las empresas de transporte, excepto para aquellos vehículos que operan cerca de su capacidad máxima de carga.
Este estudio, titulado «Estudio de caso de electrificación rentable de camiones de transporte de línea de larga distancia», fue publicado en la revista Energies.
En el futuro, la transición hacia una flota de vehículos pesados eléctricos tendrá el potencial de reducir significativamente las emisiones de carbono y disminuir la dependencia de los combustibles fósiles.
Además, la electrificación de vehículos pesados también puede generar ahorros a largo plazo en términos de costes operativos y mantenimiento. Esto se suma a los beneficios medioambientales al mejorar la calidad del aire y reducir la contaminación acústica en las áreas urbanas.
Para que esta transición sea exitosa, es fundamental que las empresas de transporte y los fabricantes de vehículos pesados estén dispuestos a invertir en tecnologías eléctricas y en la infraestructura de carga necesaria, pero eso pasa necesariamente por hacer realidad un escenario en el que los vehículos pesados eléctricos sean rentables.
Fuente | TechXplore
