Toyota es el rey de los híbridos, ¿lo será también del coche eléctrico?
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Publicado: 31/07/2023 15:18
El mercado automovilístico actual es un mejunje de tecnologías de propulsión, pero con una dirección muy clara: la electrificación 100%. No hay marca que no esté pensando o llevando ya cabo una estrategia para descarbonizar sus gamas de vehículos, en mayor o menor medida.
Sin embargo, llama la atención que el primer fabricante de coches a nivel mundial, Toyota, sea de los más retrasados en lo que a apuesta por la electrificación pura se refiere. Eso no quiere decir que los japoneses se hayan olvidado o que no estén valorando la realidad que se nos viene encima; simplemente, Toyota juega sus cartas de forma diferente.
Para que te hagas una idea, Toyota vendió 10,48 millones de coches en 2022 en todo el mundo, y tan solo ¡el 0,2%! de todos estos fueron coches 100% eléctricos. La firma nipona ocupa el puesto número 29 en el ranking mundial en lo que a venta de coches eléctricos se refiere.
Actualmente, Toyota tiene una gama muy limitada de coches eléctricos: el SUV bZ4X la berlina bZ3 para China, las diferentes versiones comerciales del Proace, y el Lexus UX si sumamos la marca Premium. Esto contrasta con, por ejemplo, los más de 20 modelos entre turismos y comerciales eléctricos en Stellantis, los 8 del Grupo BMW o los 13 de la marca más grande de coches eléctricos en China, BYD.
¿Podrá Toyota ponerse a la altura de sus competidores?
Quizás hayas olvidado los más de 20 años de experiencia de Toyota con tecnología eléctrica: desde el lanzamiento del Prius en 1997, la marca japonesa se ha convertido en la auténtica referencia del mercado de vehículos híbridos autorrecargables.
Toyota se ha ido abriendo paso en todo el mundo en las últimas décadas para hacerse su hueco en prácticamente cualquier rincón del planeta. Cuenta con una gama de vehículos extensa, con capacidad de adaptarse a las necesidades de cada mercado y con todo tipo de tecnologías: híbridos (HEV), híbridos enchufables (PHEV), eléctricos puros (BEV) e incluso de pila de combustible.
Toyota es la marca más vendida en Japón, Oriente Medio, África, Oceanía y en el Sudeste Asiático, es la marca extranjera más popular en Estados Unidos y el segundo mayor fabricante en China, el tercero en Sudamérica y el quinto en Europa.
¿De verdad alguien piensa que Toyota no pueda pelear por los primeros puestos en el futuro? Su estrategia está más que definida, aunque puedas pensar que no: Toyota quiere convivir con una gama multienergía, considerando que la tecnología 100% eléctrica en exclusiva no es la solución idónea a día de hoy… hasta al menos dentro de una década.
Eso sí, Toyota no será pionera como lo fue con el Prius y buscará encontrar su hueco en el momento en el que la tecnología esté más asentada. ¿Inspirándose en los grandes fabricantes de coches eléctricos en la actualidad? Por qué no… Los japoneses tienen la presencia internacional, el tamaño necesario para ser líder en un futuro no muy lejano. ¿Podemos decir lo mismo de, por ejemplo, Tesla?
La batería de estado sólido de Toyota puede cambiarlo todo
Toyota se marca también un objetivo también ambicioso: lograr la neutralidad de carbono para el 2040… a su manera. Seguirá siendo el rey de los híbridos hasta que el modelo actual multienergía aguante, apostando por la electrificación sí o sí, pero en diferentes niveles.
«Debemos hacer lo mejor para el medio ambiente, que es conseguir la mayor reducción de carbono posible de cada celda de batería producida, y sustituir tanto vehículos no electrificados como podamos por electrificados. Partimos de la simple premisa de que nuestro enemigo es el carbono, y no ninguna motorización en concreto», dijo el Dr. Gill Pratt, científico jefe de Toyota y CEO de Toyota Research Institute.
Toyota tiene en el calendario, no obstante, marcado en rojo: en 2027-2028 debería llegar su nueva batería de estado sólido, una tecnología que cambiará los viajes en coches eléctricos para siempre. Con el apoyo del gobierno local, la marca japonesa trabaja ya en una batería que podría ofrecer autonomías de hasta 1.500 km con una carga, más segura a la hora de cargar y con más vida útil. Eso sí, los precios iniciales serán inalcanzables para la gran mayoría pero todo se andará, sobre todo cuando aumente la capacidad productiva y se reduzcan los costes.
Ni la infraestructura actual es la adecuada, ni los costes ni presencia de los materiales raros para fabricar baterías, ni los precios de los coches eléctricos actuales acompañan, por lo que Toyota se plantea una estrategia que sí, puede parecer más conservadora para los próximos 10-15 años. Echa cuentas: según los cálculos de Toyota, con las tierras raras usadas para fabricar un coche eléctrico medio, se podría sacar lo suficiente para fabricar baterías de 6 PHEV o 90 HEV.