El día que Bill Gates chocó con la visión de Elon Musk

Bill Gates y Elon Musk tienen mucho en común, como ser visionarios y además ser de las personas más ricas del planeta. Pero también tienen enormes diferencias. Algo que se ha podido ver en otro adelanto de la biografía que Walter Isaacson está escribiendo sobre Elon Musk, donde hablan de sus choques con el propio Bill Gates.

Esta esperada biografía se publicará mañana, 12 de septiembre, y donde ayer podíamos ver un adelanto donde se hablaba de los planes de Tesla respecto al desarrollo de una nueva plataforma y del diseño del taxi autónomo.

Ahora el tema es menos tecnológico, y más personal, e involucra a dos de los pesos pesados económicos de las últimas décadas. Dos personalidades diametralmente diferentes. Elon Musk y Bill Gates.

La historia comienza con el interés de Bill Gates de visitar la fábrica de Tesla en Texas. Gates, que ya era un admirador del trabajo de Musk a los mandos de Space X, tenía curiosidad en ver como funcionaba la instalación. Y se puso en contacto con Musk para concretar una cita.

El primer choque de personalidades llegó cuando Gates le pidió a Musk el número de su asistente para poner la cita. Entonces Musk, que ya ostentaba el título de persona más rica del mundo, le contestó que no tenía secretaria y que gestionaba el directamente su agenda. Que le diese su teléfono personal a su asistente y que le llamase. Pero Gates se sintió algo violento con la situación, así que decidió concretar la visita directamente.

Choque por la posición en corto de Bill Gates contra Tesla

Al llegar a la fábrica de Austin, Texas, Gates mandó un mensaje a Musk indicándole que había aterrizado. Este envió a Omead Afshar, por entonces jefe de la oficina de Musk, a recibirlo, y acompañarlo hasta donde estaba el propio Musk.

Entonces fue cuando las dos visiones chocaron. Y es que el propio Bill Gates había comentado en varias ocasiones que las baterías nunca podrían alimentar camiones grandes y que la energía solar no sería una parte importante para resolver el problema climático. “Le mostré los números”, dijo Gates. “Es un área en la que yo claramente sabía algo que él no sabía”.

También tocó un tema delicado para el propio Musk, como es Marte. Gates le comentó que él no creía en la misión a Marte. «Es una locura que tal vez haya una guerra nuclear en la Tierra y entonces la gente en Marte está allí y regresará y, ya sabes, estará viva después de que todos nos matemos unos a otros”.

Pero el gran desacuerdo llegó cuando Musk le recordó su posición en corto contra Tesla. Gates había invertido 500 millones de dólares contra las acciones de Tesla. Algo que indignó a Musk.

Cuando llegó a Austin, Gates había perdido 1.500 millones de dólares. A pesar de eso, la posición de Musk contra los vendedores en corto era bastante clara y bastante agresiva, y no se hacen excepciones por mucho que tu apellido sea Gates.

Este pidió perdón a Musk: “Le pedí disculpas. Una vez que se enteró de que había puesto en corto las acciones, fue muy malo conmigo, pero es muy malo con tanta gente, así que no puedes tomártelo como algo personal”.

Pero si algo ha puesto sobre la mesa esta disputa, son las diferentes personalidades de cada uno de estos gigantes de la industria.

Según Musk: «Cuando le pregunté a Gates por qué había puesto en corto a Tesla, me explicó que había calculado que la oferta de coches eléctricos superaría a la demanda, lo que provocaría una caída de los precios. Asentí pero todavía tenía la misma pregunta: ¿Por qué había puesto en corto las acciones? Gates me miró como si no hubiera entendido lo que acababa de explicar y luego respondió como si la respuesta fuera obvia: pensaba que poniendo en corto a Tesla podría ganar dinero.»

Esto suponía un shock para un Musk cuya misión personal era transformar el mundo hacia la movilidad eléctrica y las energías renovables. Una misión en la que incluso llegó a invertir hasta su último dólar, llegando al borde de la bancarrota.

Había un factor que hacía que el resentimiento de Musk contra Gates fuese todavía más intenso, y era la posición del fundador de Microsoft como filántropo. Un apartado que Gates había abrazado de forma definitiva después de su «jubilación» como presidente de la tecnológica, y en la que invertía grandes sumas en apartados como la producción de mosquitos para erradicar enfermedades como el dengue, zika, chikungunya y la fiebre amarilla, también inversiones en lucha contra el cambio climático, la pobreza…etc.

Pero a pesar de esto, había realizado una apuesta contra una de las empresas que más estaba haciendo para luchar contra el cambio climático al buscar la electrificación del transporte y por la expansión de las energías renovables.

Según Musk: «¿Cómo puede alguien decir que le apasiona luchar contra el cambio climático y luego hacer algo que reduzca al máximo la inversión general en la empresa? Es pura hipocresía. ¿Por qué ganar dinero con el fracaso de una empresa de automóviles eléctricos?«

A pesar de esto, Gates intentó continuar con su conversación para tratar de involucrar a Musk en alguna de sus acciones filantrópicas. Pero de nuevo topó con la posición impertérrita de Musk, que le respondió si todavía tenía su posición en corto sobre Tesla.

Gates contestó que no, que no la había cerrado. Ante esto, Musk le volvió a contestar con un: “Lo siento. No puedo tomarme en serio su filantropía en materia de clima cuando tiene una enorme posición corta contra Tesla, la empresa que más hace para resolver el cambio climático”.

Posteriormente, la personalidad abrupta de Musk volvió a brotar dando visibilidad a su animadversión por Gates, y el resto de inversores en corto, al publicar en su multimillonaria cuenta de Twitter de un meme del propio Gates, donde este lucía una prominente barriga, y que Musk aprovechó para indicar «En caso de que necesites perder una erección rápidamente«.

A pesar de esto, Gates mantuvo el tipo e incluso llegó a defender a Musk. En una cena en Washington, donde la gente criticaba a Musk, Gates salió en su defensa. “Puedes sentir lo que quieras sobre el comportamiento de Elon, pero no hay nadie en nuestro tiempo que haya hecho más que él para ampliar los límites de la ciencia y la innovación”.

Como nota curiosa, indicar que en lugar de una posición en corto que le ha traído fuertes pérdidas, Gates hubiese invertido esos 500 millones de dólares en acciones de Tesla, hoy estas tendrían un valor de unos 1.400 millones de dólares. Casi el triple.