La planta de Tesla en Alemania se encarga en estos momentos de fabricar únicamente un modelo, el Model Y. Pero según los rumores, las últimas ampliaciones que está realizando el fabricante americano en las instalaciones tienen como objetivo acoger a medio plazo también la producción de su próximo lanzamiento, su propuesta más económica.
Así lo acaba de publicar hace unos minutos Reuters, que en una breve nota donde se citan fuentes internas anónimas, Tesla estaría preparándose para fabricar el conocido como «coche de 25.000 euros», o también extraoficialmente Model 2, en su planta de Berlín.
De momento, Tesla no ha comentado la noticia, algo que suele ser habitual en un fabricante que prefiere esconder sus cartas casi hasta el último momento. No siempre claro, y tenemos ejemplos como el Roadster 2.0, la Cybertruck, Tesla Semi…
Pero cuando se trata de proyectos clave, como el nuevo Model 3, si hay un enorme secretismo solo roto por los avistamientos de modelos de pruebas debido al enorme seguimiento de cada movimiento en las plantas de la marca estadounidense.
Así será el Tesla Model 2
Durante el pasado mes de julio, las declaraciones del gobernador del estado mexicano de Nuevo León, donde se levantará la nueva fábrica de Tesla, ponía sobre aviso a todos de que el proyecto estaba más avanzado de lo esperado, con el diseño del vehículo totalmente terminado.
Por lo tanto, era cuestión de poco tiempo que se rematase el aspecto técnico, y se comenzasen a preparar las instalaciones de donde saldrá. Unas instalaciones que en un primer momento se pensaba que serían las propias de México, pero que ahora parece que Tesla volverá a localizar su fabricación lo más cerca posible de cada mercado. México para Norteamérica, Berlín para Europa y Shanghái para Ásia y Oceanía.
Las informaciones nos indican que el Model 2 será un crossover del segmento C. Por lo tanto, será rival de propuestas como el BYD Atto 3, el KIA e-Niro, el MG ZS EV o el Renault Scénic E-TECH, de los que se desmarcará por ofrecer unos precios mucho más bajos, pero sin renunciar por ello a seguir siendo una importante fuente de ingresos y beneficios para la marca.
Esto lo logrará precisamente reduciendo costes de forma masiva. El propio Musk ha confirmado que el objetivo de sus ingenieros es lograr que la nueva plataforma cueste la mitad que la utilizada en los Model 3 y Model Y, que ya destacan por ser mucho más competitivos a nivel de precio que sus rivales.
Otra de las claves, además de la economía de escala, serán las baterías y la técnica de producción del chasis. Tesla utilizará baterías LFP (litio-ferrofosfato), un pack estructural y grandes piezas de función en los subchasis delantero y trasero.
Un Model 2 que heredará toda la experiencia de Tesla tanto en producción, diseño, pero también recibirá las últimas evoluciones del sistema de propulsión que le permitirá contar con un tren motriz eficiente al mismo tiempo que potente, y sin renunciar a tecnologías clave como la conducción autopilotada, pero que llegará con un competitivo precio que si cumple lo prometido, desde 25.000 euros, sin duda supondrá un golpe sobre la mesa.
