El Porsche Macan destapa sus cartas. Bajo coeficiente aerodinámico, 100 kWh de batería y carga a 270 kW

El nuevo Porsche Macan debería llegar este año al mercado, y lo hará con todo lo necesario para convertirse en un éxito de ventas para la marca alemana. Un modelo que contará únicamente con motorización 100% eléctrica, y que está terminando sus últimas pruebas antes de su desembarco comercial.

Uno de los desafíos a los que se enfrenta un SUV eléctrico cuando pasa de la era gasolina a la eléctrica, es el de mantener su identidad y diseño, pero intentando mejorar en la medida de lo posible su eficiencia. Y es que en un eléctrico, cada kWh de consumo cuenta.

Es por eso que Porsche ha realizado un trabajo profundo en el aspecto de la aerodinámica, donde los diseñadores del Macan han asegurado encontrar la conexión óptima entre los principios de diseño y las especificaciones, lo que ha supuesto tener que trabajar a fondo con cada milímetro de carrocería para lograr el equilibrio óptimo entre estética y rendimiento.

Gracias a este trabajo, Porsche ha logrado un conjunto que mantiene la filosofía de diseño del Macan actual, pero completado con una aerodinámica optimizada. Algo que indican, han logrado no solo mediante cambios en la línea del coche, sino también con los componentes Porsche Active Aerodynamics (PAA) y otras medidas específicas.

Según explica Thomas Wiegand, Director de Aerodinámica y Aeroacústica de Porsche: “Todos los elementos aerodinámicos activos contribuyen significativamente a mejorar la autonomía. Tenemos un alerón trasero que se despliega automáticamente y trampillas de refrigeración activas en las tomas de aire delanteras”.

También hay elementos variables en los bajos. El suelo del vehículo es plano y cerrado, incluso en la zona del eje trasero. Los carenados son flexibles y también garantizan una baja resistencia al aire en los rebotes, una solución innovadora en combinación con las llantas aerodinámicas y los contornos optimizados de los neumáticos.

En conducción normal por carretera, el Macan adapta automáticamente su sistema aerodinámico para la mejor combinación para cada situación. Por ejemplo, cuando el alerón trasero se coloca en la posición Eco, las trampillas de aire se cierran y el nivel del chasis desciende. Con esta disposición, el vehículo ha logrado un coeficiente aerodinámico de 0,25 Cd, cifra que podemos comparar con los 0,35 Cd del modelo actual.

Algo que permite al Macan eléctrico convertirse en uno de los SUV más aerodinámicos del mercado, algo que además tiene su impacto en la eficiencia en circulación por autovía, logrando según Porsche, más de 500 kilómetros de autonomía homologada.

Para conseguirlo, además de trabajar el aspecto aerodinámico, Porsche también ha instalado una gran batería que llega a los 100 kWh brutos. Una cifra que por suerte no cuenta con el exagerado margen de protección con el que debutó su hermano el Porsche Taycan, siendo la capacidad útil de 95 kWh.

Esto se traduce que mientras que en el Taycan la capacidad útil era del 89.6%, en el Macan la cifra sube hasta el 95%. Por lo tanto, el SUV sacará más partido a una batería algo más grande en capacidad.

Esto además no supone perder otra de las principales características de los Porsche eléctricos, como es su capacidad de recarga ultrarrápida.

La arquitectura de 800V de la plataforma PPE del nuevo Macan permite en una estación capaz de ofrecer más de 300 kW, lograr unas potencias de 270 kW. Suficiente para pasar del 10 al 80% de carga en apenas 22 minutos.

Pero como la mayor parte de las estaciones son de 400V, Porsche también ha tenido esto en cuenta para lograr sacar el máximo partido a la potencia disponible en cada momento gracias a un interruptor de alto voltaje que permite que esa batería de 800 voltios se pueda desdoblar en dos, cada una con una tensión nominal de 400 voltios. Así se consigue una carga especialmente eficiente, sin un amplificador HV adicional de hasta 150 kW.

Porsche Macan eléctrico: su sistema de propulsión y dinamismo

Un Macan eléctrico que no se olvida de la herencia de la marca en cuanto a altas prestaciones, y para la ocasión contará con elementos como dos motores PSM síncronos de imanes permanentes, cada uno situado en un eje.

Esto le permitirá disfrutar, además de tracción a las cuatro ruedas, de una potencia de hasta 450 kW (603 CV) que además podrá ofrecer de forma continuada, y no solo en aceleraciones cortas. Tampoco se limitará a las rectas, ya que el Macan podrá meterse sin miedo en circuito donde sacará el máximo partido al sistema de tracción diseñado por Porsche para el Macan, que gestiona la distribución de más de 1.000 Nm de par con el Launch Control en el modelo superior, casi en tiempo real.

Otro de los aspectos en los que ha trabajado la marca alemana es ofrecer una suspensión capaz de ofrecer altas prestaciones en circuito, pero también un tarado cómodo para no castigar la espalda en el día a día. Para ello, los ingenieros de Porsche han desarrollado el sistema Active Suspension Management con tecnología de amortiguación de dos válvulas, suspensión neumática, bloqueo transversal del eje trasero y, por primera vez, dirección en el eje posterior con un ángulo de hasta cinco grados.

Precisamente para el día a día, el Macan contará con un interior que supone un salto adelante enorme tecnológicamente para una marca muy tradicionalista en este aspecto. Un SUV que contará con un sistema de tres pantallas: una frente al volante de información de la conducción y que estará formado por un panel curvo de 12.6 pulgadas. Otra central para el sistema de info-entretenimiento con 10.9 pulgadas, y como principal novedad, una tercera pantalla opcional de las mismas 10.9 pulgadas para el acompañante.

Queda por saber la fecha de llegada al mercado, que se espera para este año. Esto se debe a que en julio, Porsche dejará de vender el Macan con motor de combustión, y entonces tendrá que producirse el relevo. Algo que nos indica que salvo sorpresa, el Macan eléctrico debería comenzar sus ventas a mediados del año, con unas primeras entregas antes de terminar este 2024.

También faltan saber unos precios que deberían moverse en el arco alto de los modelos de combustión, con un Macan S, con 380 CV de potencia, que arranca en los 93.310 euros en España, o los 112.272 euros del Macan GTS, con un motor de 440 CV.

Fuente | Porsche