LG, la ‘salvación’ para Tesla con sus nuevas baterías cilíndricas, se adelanta al resto y las producirá ya este verano

Hace unos años, allá por el año 2020, Tesla anunció su desarrollo interno de las celdas de batería 4680 en un programa piloto que, en su primera generación, no terminó de cuajar del todo bien. La firma norteamericana tuvo que recurrir a los especialistas surcoreanos como LG Energy Solutions o Panasonic para la producción de estas baterías cilíndricas de alta capacidad.

Este tipo de baterías no son las más habituales en la industria automovilística, y aun así hemos visto como Tesla las utilizaba en algunas versiones de su Model Y fabricadas en su gigafábrica de Texas o en su Cybertruck. Los principales fabricantes de baterías están desde entonces más que  interesados en este tipo de empaquetar las celdas que almacenen la electricidad necesaria para que los coches eléctricos se muevan.

Ahora, cual carrera por ser la primera en conseguirlo, es LG la que ha confirmado cuándo empezará a producir sus baterías de tipo 4680 para Tesla. Será en verano, sobre el mes de agosto: la producción en serie arrancará en las instalaciones de la compañía en Ochang, en Corea del Sur. Más adelante, se fabricarán también en suelo norteamericano, una vez que la planta en construcción de Arizona esté terminada para el 2025.

Esta última es una ubicación estratégica para LG Energy Solutions, ya que es una puerta de entrada al mercado estadounidense para los incentivos gracias a la Ley de Reducción de la Inflación (IRA). Pero ojo, porque también estaría abierta la posibilidad de producir estas baterías cilíndricas en China.

Según las estimaciones de Tesla, el uso de este formato de celdas de batería permitirá incrementar la autonomía de sus coches eléctricos en un 16% y reducir los costes en un 14%. Tanto LG, uno de los principales fabricantes de baterías de iones de litio para vehículos en el mundo, como Panasonic o incluso Samsung o el gigante chino CATL, aspiran a copar la producción de esta clase de baterías de alta capacidad.

Con un diámetro de 46 mm y una altura de 80 mm, estas son las celdas cilíndricas más grandes para vehículos eléctricos: garantizan una mayor densidad de energía, una producción más simple y unos costes menores. Sin embargo, su mayor tamaño también entraña dificultades, así como el recubrimiento en seco de los electrodos, algo que trajo de cabeza a los técnicos de Tesla y que obligó a la marca norteamericana a recurrir a sus socios surcoreanos al no poder escalar correctamente su proceso de fabricación.

Tesla ha establecido también acuerdos con otra compañías asiáticas, como Ningbo o L&F, estos últimos para el suministro de cátodos con alto contenido en níquel, lo que permitirá aumentar aún más la densidad energética de las celdas 4680.

Fuente | DriveTeslaCanada