Smart #2, la marca ya trabaja en el sustituto del Fortwo eléctrico y busca socio para una plataforma compartida

Smart dio un vuelco importante a su estrategia tras pasar a formar parte del conglomerado chino Geely, poseedora del 50% de la marca (la otra parte la mantiene Daimler, Mercedes). De los pequeños Fortwo y Forfour de una época pasada, se ha pasado a intentar conquistar segmentos más altos con nuevos SUV eléctricos llamados #1, #3 y #5.

Si te das cuenta, los tres primeros vehículos Smart en su nueva era eléctrica corresponden con números impares. ¿Y los pares? Si bien los primeros están destinados a modelos SUV, los futuros coches eléctricos de Smart con número par se corresponderán con «otro tipo de modelos».

De esta forma, el futuro Smart #2 podría dar forma a un modelo que todos recordamos. El Fortwo eléctrico dejó de fabricarse hace apenas un par de meses, y lo hizo sin un sustituto aparente. Pero el hecho de que la marca haya dejado ese hueco, dejaba entrever que, de haber de nuevo un pequeño urbano eléctrico en la gama Smart, usaría esa primera denominación par. Eso sí, tendrá un tamaño más pequeño que el Smart #1, lo que podría generar algo de confusión.

Ahora, esta idea parece empieza a coger forma y la marca ya reconoce los primeros pasos en esa dirección. El CEO de Smart en Europa, Dirk Adelmann, ha reconocido que ya están trabajando en ello: «El Fortwo actual dejó de fabricarse hace dos meses. Habría sido fantástico tener un sucesor directo; no lo tenemos, pero estamos trabajando en ello».

Tras 26 años de producción y 3 generaciones distintas, el Smart Fortwo fue allá por el año 1998 el primero de la marca, y logró ser un auténtico éxito en ventas. Ahora, su sucesor podría estar a la vuelta de la esquina: el medio Autocar, que logró las declaraciones de Adelmann, afirma que el «Proyecto 2» podría recibir la luz verde en cuestión de meses… pero con una condición.

Smart busca socio para el futuro #2

‘Se busca socio, para el desarrollo de un coche eléctrico pequeño y con el que compartir gastos. Razón: Smart’, podría ser perfectamente un anuncio por palabras de la marca. Y es que la condición para desarrollar un sustituto para el Fortwo eléctrico es que este debe ser rentable, o al menos demostrarlo en un primer momento para obtener su aprobación. Y aunque no hay nada oficial, este podría fabricarse en Reino Unido, como medida preventiva a los aranceles de la UE.

Eso pasa por encontrar un socio que permita a Smart abaratar costes de desarrollo, otra empresa con la que compartir estos costes productivos. «El segmento (de los coches urbanos) no es muy grande en Europa. El mejor año para el Fortwo fue de alrededor de 100.000 unidades, y eso no es suficiente para justificar una plataforma. Si compartes esta plataforma con socios, entonces también puedes compartir los costos de inversión y el sitio de producción, etc., y comienza a tener sentido», asegura Adelmann.

Smart tiene claro que no quiere un vehículo con el que «nadie gane dinero», o que pueda generar un impacto de negocio negativo para la marca, los proveedores y, cómo no, para los clientes. El problema es que su propietaria Geely no cuenta actualmente con una plataforma que encaje en esta configuración tan pequeña que hemos conocido del Fortwo.

Los ya conocidos Smart ‘impares’ se asientan sobre la plataforma SEA del gigante chino, la misma que usan los eléctricos de Volvo, Polestar o Lotus. El trabajo de evaluación para dar vida a un nuevo Fortwo eléctrico ya ha comenzado en Smart.