Jaguar estará un año sin vender vehículos hasta la llegada de sus nuevos coches eléctricos

Jaguar está decidida a transformarse en una marca 100% eléctrica en el corto plazo. Su transformación es más que necesaria, en un momento en el que la firma británica parecía deambular sin rumbo fijo. Aunque la apuesta es atrevida y arriesgada, por lo menos Jaguar ya tiene definidos sus próximos meses y tiene marcada su hoja de ruta para su reposicionamiento en el mercado.

De esta forma, en el calendario de la marca está marcado el final de este año 2024, en diciembre, como el momento de presentación del prototipo de vehículo eléctrico que sentará las bases de lo que veremos de verdad a partir del 2026. Sin embargo, ese año que queda en el medio marcará un importante vacío para el fabricante británico.

Y es que como ya habíamos dicho anteriormente, la venta de vehículos Jaguar con motores de combustión tiene fecha de caducidad. Los XE, XF y F-Type ya se han dejado de producir en la factoría de Castle Bromwich, mientras que los E-PACE e I-PACE harán lo propio a finales de este año en las instalaciones de Magna en Austria. El último en decir adiós será el F-PACE, cuyo fin de producción debería producirse antes de mediados de 2025.

«Ya no estaremos a la venta como vehículos nuevos en ciertos mercados europeos a finales de este año», confirmó el CEO de Jaguar, Rawdon Glover. En Reino Unido se espera que esto suceda «a principios del año que viene». Y dado que las entregas del primer eléctrico de la nueva era de Jaguar no llegarán a las carreteras antes del 2026, se espera que haya incluso un año sin coches Jaguar nuevos a la venta en su país natal. «Sí, habrá un período en el que no se podrá comprar un Jaguar».

Qué sabemos del primer Jaguar de la nueva era eléctrica

Tras el poco éxito del Jaguar I-PACE, la marca del felino lo dará todo con su nueva generación de coches eléctricos, los cuales no tendrán nada que ver con los vehículos de la firma británica que hemos visto en los últimos años. Ni a nivel técnico, ni de diseño, ni de posicionamiento.

El prototipo que se desvele en diciembre sentará las bases no solo de un GT de cuatro puertas eléctrico, el primero de esta nueva saga, sino que servirá para marcar las nuevas líneas de diseño de los futuros eléctricos. Entre estos parecen también garantizados un nuevo SUV que rivalice con el Bentley Bentayga y una gran berlina que haga lo propio con el Bentley Flying Spur.

El primero de todos será, como decíamos, un GT de cuatro puertas con dos motores eléctricos que sumen más de 575 CV, una autonomía eléctrica de más de 700 kilómetros, un sistema de carga ultrarrápida y un precio que supere los 120.000 euros. A nivel de diseño, veremos una reinterpretación del emblema del felino en el frontal, capós más largos y prominentes, nuevo diseño de los faros LED en los extremos… e incluso denominaciones que hagan un guiño al pasado de la marca.

Faltan muchos detalles por darse como oficiales, pero el CEO de Jaguar no tiene problemas en adelantar la revolución que está por llegar a la marca. «Si lo analizamos, el mercado del coche eléctrico es bastante homogéneo, y sospecho que esa podría ser parte de la razón por la que el sector se ha estancado. Lo que nosotros queremos hacer es fabricar un coche que realmente desafíe algunas de esas convenciones», afirma Glover, que apunta a que los diseños de los actuales coches eléctricos son «bastante similares por cuestiones de autonomía».

Los nuevos eléctricos de Jaguar supondrán un reposicionamiento de la marca: «Nuestros productos, y quizás la próxima generación de productos, marcarán una gran diferencia en la percepción que se tiene de todo el sector. Las barreras racionales para la propiedad de coches eléctricos en este momento siguen existiendo: la ansiedad por la autonomía, la infraestructura, la necesidad de cargar en lugares públicos… Si abordamos cada uno de estos aspectos por separado, todos nuestros vehículos tendrán una influencia significativa».

Los nuevos Jaguar eléctricos serán coches ostensiblemente más caros, ya que la marca priorizará la calidad y el valor por encima del volumen, estimándose en un máximo de 50.000 unidades anuales. No hay vuelta atrás en Jaguar y la apuesta al coche eléctrico es total, asentados sobre la misma plataforma JEA (Jaguar Electrified Architecture) y sin caminos intermedios en forma de híbridos o híbridos enchufables.

Fuente | Autocar