La mayor parte de los fabricantes en Europa están en aprietos para cumplir las normas de emisiones en 2025

En 2025 se pondrá en marcha una nueva fase del proyecto de reducción de emisiones de la UE. Un nuevo paso adelante que, a pesar de llevar unos cuantos años anunciado y aprobado, cogerá a muchos grupos automovilísticos con los deberes sin hacer. Algo que un análisis de la consultora Dataforce ha confirmado con apenas dos grupos cumpliendo los requisitos, y el resto en diferentes grados de distancia con los mismos lo que le abocará a pagar fuertes multas, o soltar el freno y ponerse a vender de verdad coches eléctricos.

Según Dataforce, de los grupos con marcas con modelos con motor de combustión en su oferta, sólo la china Geely, (Volvo, smart y Polestar) y el grupo SAIC (MG) se encuentran actualmente por debajo del nuevo máximo de 93,6 g/km.

Por detrás hay otros actores que parece que no tendrán demasiados problemas para cumplir sus objetivos, con Toyota (105 g/km) y BMW (106 g/km). A partir de ahí empiezan los problemas para alcanzar las tasas máximas de CO2.

Según los datos, Volkswagen se mueve actualmente en los 123 g/km, mientras que Ford lo hace en 125 g/km. Otros fabricantes de volumen como Stellantis (113 g/km), Renault-Nissan-Mitsubishi (114 g/km) o Hyundai Motor Group (108 g/km) obtienen mejores resultados, pero también están por detrás y tendrán que pisar el acelerador en los próximos meses en cuanto a ventas de coches eléctricos.

Entre las marcas premium alemanas, BMW está situada con 108 g/km, mientras que Mercedes-Benz sube dos gramos, 110 g/km.

Según los cálculos de Dataforce, todos los grupos están cerca o en su mayoría por debajo de sus objetivos para 2024. Siete de cada diez ya están por debajo de ellos. «El grupo VW, Renault-Nissan-Mitsubishi y Ford están ligeramente por encima de esta cifra, pero deberían poder alcanzar la reducción de 1-2 g/km aún necesaria en la segunda mitad del año«, afirman los analistas. Si se supera el límite, los fabricantes deberán pagar una multa de 95 euros por vehículo vendido por cada gramo que supere el límite.

Según Dataforce, sólo la empresa china Geely y los fabricantes de coches eléctricos como Tesla están por debajo del objetivo para 2025.

Teniendo en cuenta las emisiones actuales específicas del tipo de combustible, un fabricante sin híbridos  en su cartera necesitaría una cuota del 37% de los coches eléctricos a batería o híbridos enchufables en su mix de ventas.

En cambio, si la cuota de híbridos llega al 55%, la cuota de eléctricos o híbridos enchufables bajaría hasta un 23%. Sin embargo, la tendencia nos indica que los fabricantes con un fuerte enfoque en los híbridos tienden a vender menos eléctricos a batería.

Una opción para cumplir con las regulaciones de CO2 es el llamado CO2 Pooling, o la reventa de derechos de emisiones entre grupos. Según los datos: «No ha habido mucha necesidad de pooling en los últimos dos años, pero en 2021 el antiguo grupo FCA unió fuerzas con Tesla y Honda para reducir su promedio de CO2. Los analistas esperan una reactivación del pooling de CO2 en 2025«.

Lo que si parece claro es que tal como está la situación actual en Europa, parece imposible que se alcance un nivel de electrificación suficientemente alto para que los grupos cumplan los nuevos objetivos de CO2.

Sin embargo, la electrificación no es un proceso lineal, sino que se produce de forma gradual. Como ejemplo el enorme salto dado entre 2019 y 2020, o el estancamiento técnico que está viviendo Europa en 2024.

Una dinámica que los expertos indican necesita ser abordado por los fabricantes trasladando la fuerte reducción de costes que están viviendo materias primas como el litio, que han bajado de coste de forma drástica en los últimos dos años, sin que ello se haya reflejado de forma clara en los precios finales.

Algo que se puede sumar a la puesta en marcha de propuestas en segmentos más económicos, lo que reducirá el coste medio de compra y permitirá aumentar la cuota de ventas de los modelos cero emisiones.

Opinión

Todo esto debería traducirse en un final de 2024, y un 2025, muy activo en cuanto a ofertas y nuevos lanzamientos de coches eléctricos. Principalmente en cuanto a modelos de precio razonable, que supondrá la entrada en el mercado de las propuestas «por debajo de los 25.000 euros». 

Algo que supondrá más competencia por un mercado que no ha crecido como los grupos esperaban, y que les obligará a dar un paso adelante en cuanto a descuentos y ofertas de financiación blanda para tratar de aliviar stock, e incluso recuperar parte de la capacidad de producción perdida.

Fuente | Dataforce