Tesla actualizará el ordenador HW3 para los propietarios que hayan pagado el FSD

Durante una comparecencia ante los inversores, Elon Musk ha confirmado que Tesla se hará cargo del cambio en la CPU de aquellos propietarios que hayan adquirido uno de sus modelos y hayan pagado por la conducción autónoma completa (FSD).

Esto será, tal como ha dicho el propio Musk, un proceso duro y doloroso (económicamente) para Tesla, que tendrá que enfrentarse al cambio de la CPU de cientos de miles de unidades.

Anteriormente, el propio Musk insinuó que se realizarían actualizaciones y parches para lograr hacer funcionar el sistema sin supervisió. Pero ahora, el directivo ha admitido el error, indicando que las actuales CPU no serán capaces de hacer funcionar el FSD, por lo que se tendrá que sustituir por una más moderna.

Eso si, como en anteriores ocasiones, se ha añadido una coletilla al anuncio, y en este caso Tesla ha dicho que la oferta solo estará disponible para aquellos que hayan comprado el paquete FSD, y no para aquellos que se hayan suscrito al sistema por mensualidades.

Según Musk: “La respuesta honesta es que tendremos que actualizar las computadoras HW3 de quienes hayan comprado el paquete FSD. Será complicado y doloroso, pero lo lograremos. Ahora me alegro de que no haya mucha gente que haya comprado el paquete FSD”.

¿Por qué hay que actualizar el HW3?

El sistema FSD de Tesla depende en gran medida del hardware para procesar datos en tiempo real de las cámaras y los sensores. El HW3, presentado por primera vez en 2019, fue un avance significativo con respecto a las versiones anteriores, ya que presenta chips de inteligencia artificial personalizados de Tesla diseñados para el procesamiento de redes neuronales.

Sin embargo, ahora que Tesla está implementando su hardware HW4, mucho más avanzado, han aumentado las preocupaciones sobre si los modelos más antiguos equipados con FSD pueden mantenerse al día con los últimos desarrollos de software, especialmente porque los lanzamientos de HW3 han comenzado a retrasarse significativamente con respecto a los de HW4, creando una situación complicada para la marca.

Eso si, ya lo ha dicho Musk, y es que no se trata simplemente de cambiar una CPU por la otra. El espacio físico ha cambiado respecto al diseño de HW4, por lo que Tesla tendrá que buscarse la vida para diseñar una CPU que entre en el espacio del HW3. Algo que se antoja no será fácil.

Una de las posibilidades es que Tesla desarrollo una versión actualizada del sistema anterior, que le permita aumentar su capacidad de procesamiento y solventar la cuestión del tamaño. También queda por ver si el hardware actual es capaz de soportar los requisitos. Elementos como las cámaras, que obligarían a la marca a hacer un esfuerzo todavía mayor.

Pero el gran problema es el tiempo. Serán cientos de miles de unidades las que tengan que pasar por unos Servicios Técnicos de Tesla que se verán sobrecargadas de trabajo, lo que, en muchos casos, supondrá una espera de meses hasta lograr una cita.