
El Renault Megane se actualiza. Adiós a las versiones más baratas, hola al acabado Esprit Alpine y a la carga bidireccional
Renault ha remodelado por completo la gama del Mégane eléctrico con el objetivo de marcar distancias con el nuevo R4. Entre otras novedades, ha ganado una interesante función One Pedal.

Hace tan solo unas horas, publicamos un artículo en el que comparábamos el nuevo Renault 4 con su hermano mayor, el Mégane. Dos propuestas que, en sus versiones de acceso, se solapaban por completo, ofreciendo un tamaño, unas prestaciones, una autonomía e incluso un precio muy similares. Consciente de ello, la firma del rombo ha tomado cartas en el asunto.
La gama del Mégane se acaba de reestructurar por completo con la desaparición de los modelos ‘130 CV autonomía urbana’ y ‘130 CV autonomía confort’, dejando como única opción mecánica el tope de gama ‘220 CV autonomía confort’. Además, la oferta pasa a estar compuesta por dos niveles de acabado: Techno (desde 35.155 euros) y el inédito Esprit Alpine (desde 37.825 euros).
La terminación Esprit Alpine se distingue por detalles exclusivos como la pintura satinada gris pizarra, las llantas de aleación de 20 pulgadas en color negro, las insignias de Alpine y el acabado negro brillante del cerco de las ventanillas. En el interior habría que destacar los asientos tapizados en negro con costuras azules, así como diversos elementos decorativos en el mismo tono. Como ya ocurre en el Scénic, la moqueta del suelo también es azul.
El Renault Mégane también incorpora como primicia un quinto nivel de retención para el sistema de frenada regenerativa denominado One Pedal. Esta función permite practicar la llamada ‘conducción de un pedal’, controlando tanto la aceleración como el frenado únicamente con el acelerador. El fabricante afirma que esta tecnología ofrece ventajas como una mejor autonomía, una conducción más cómoda en entornos urbanos y un menor desgaste de las pastillas de freno.

El Renault Mégane ahora dispone de la función One Pedal
Ampere, la división de coches eléctricos y software del Grupo Renault, introducirá este avance en los próximos meses tanto en el R5 como en el Scénic. El R4 por su parte contará con este equipamiento desde el momento de su lanzamiento.
Otra novedad es la incorporación como parte del equipamiento de serie de un nuevo cargador bidireccional de 11 kW en corriente alterna; además, se mantiene el cargador de 22 kW como opción. Mediante un adaptador opcional V2L (Vehicle to Load), el compacto eléctrico puede suministrar energía a dispositivos externos.

Nuestro protagonista combina un motor de 220 CV (160 kW) con una batería NCM (níquel, cobalto, manganeso) de 60 kWh de capacidad, la cual le proporciona una autonomía de 468 km WLTP. En cuanto a la carga rápida en corriente continua, alcanza un pico de 130 kW, pudiendo pasar del 15 al 80% en 36 minutos.