Cazado en Nürburgring el brutal deportivo eléctrico chino que desafía a Porsche en su territorio
El nuevo deportivo eléctrico de Denza ha sido cazado en Nürburgring con una configuración casi definitiva. Superará los 900 CV y contará con suspensión adaptativa y neumáticos semi-slick. Un rival directo para las marcas consagradas que no tienen respiro por parte de los chinos ni en los segmentos más premium.
La firma premium de BYD pisa fuerte el acelerador con el Denza Z. Un coche eléctrico de altas prestaciones que no esconde sus intenciones: plantar cara a los grandes deportivos europeos, y que ha sido avistado durante unas pruebas en el "infierno verde".
Hace apenas unos meses que Denza presentó el prototipo de su primer deportivo eléctrico, un modelo que, según la marca, tiene como objetivo superar a referentes como Porsche o BMW. Ahora, este coche vuelve a ser noticia tras haber sido cazado en plena fase de pruebas en el circuito de Nürburgring, luciendo una configuración casi idéntica a la del concept original.
Aunque aún se encuentra camuflado, el diseño ya deja entrever una propuesta agresiva y orientada al rendimiento. En el frontal destacan unas tomas de aire de gran tamaño, un splitter pronunciado y unos faros LED muy finos. Los pasos de rueda delanteros incorporan unas rejillas similares a las de los modelos más radicales de Porsche, mientras que la línea lateral alarga la silueta con proporciones de auténtico gran turismo.
Detrás, el Denza Z monta un alerón fijo de grandes dimensiones, acompañado de un difusor funcional y ópticas LED. Toda esta configuración apunta directamente a maximizar la eficiencia aerodinámica, un punto clave cuando se buscan tiempos por vuelta competitivos.
Las llantas calzan neumáticos semi-slick GitiSport GTR3, con medidas de 275/35 delante y 325/30 detrás. Una elección que refuerza aún más su orientación hacia circuito, alejándose del enfoque tradicional de la mayoría de coches eléctricos actuales.
Denza Z: un deportivo eléctrico con 900 CV y suspensión adaptativa
Aunque Denza no ha confirmado todavía los datos técnicos definitivos, todo apunta a que el Z utilizará una configuración de tres motores eléctricos. Este mismo esquema ya lo emplea el Denza Z9 GT, una berlina de altas prestaciones con 952 CV. Por tanto, no sería descabellado pensar que el deportivo iguale, o incluso supere, esa cifra.
Algunas filtraciones apuntaban a una potencia limitada a 536 CV, pero teniendo en cuenta que el Z9 GT ya alcanza los 952 CV, parece improbable que Denza apueste por recortar potencia en su modelo más aspiracional.
Con más de 900 CV bajo el capó, se espera que este deportivo pueda acelerar de 0 a 100 km/h en menos de 3 segundos. Sin embargo, Denza no quiere quedarse solo en las cifras de aceleración. Las pruebas en Nürburgring y el equipamiento que ya se puede observar en los prototipos confirman una ambición clara de ofrecer un comportamiento dinámico a la altura de los mejores.
La suspensión delantera será de doble horquilla, con amortiguadores magnetorreológicos capaces de adaptar su dureza en apenas 10 milisegundos. Esta tecnología, junto a un chasis desarrollado específicamente para este modelo, promete ofrecer un equilibrio entre confort y precisión en curva, incluso en trazados tan exigentes como el Nordschleife.
El habitáculo también jugará un papel importante. Basado en el concept, se espera que el interior esté dominado por una combinación de cuero y Alcantara, acompañado de una instrumentación digital, una gran pantalla central y una tercera pantalla para el pasajero. Todo pensado para crear una atmósfera tecnológica y premium.
Con esta ofensiva, Denza busca algo más que presencia en Europa. Quiere competir, y ganar, en el terreno de las emociones. Y eso pasa por enfrentarse cara a cara con marcas como Porsche, que hasta ahora dominaban este territorio. Si el Z cumple con lo que promete sobre el papel, estamos ante uno de los lanzamientos más relevantes del año para el mercado de coches eléctricos de altas prestaciones.
