
El Renault Megane pronto sufrirá una importante evolución, y el nuevo Nissan LEAF nos da algunas pistas
Renault está preparando una extensa actualización para el Mégane. Todo apunta a que el compacto eléctrico recibirá algunas de las mejoras estrenadas por el nuevo Nissan LEAF.

Hace unos días, os contábamos que el Renault Mégane sufrirá una profunda actualización de cara al año que viene. El compacto francés se ha quedado en tierra de nadie tras el lanzamiento de los R4 y Scénic, con los que se solapa por completo. Por este motivo, la firma del rombo está preparando un restyling que, al menos sobre el papel, debería devolverle el peso que ha perdido en la gama.
De acuerdo con lo recogido por los medios franceses, una de las principales novedades será la aparición de nuevas baterías: los actuales packs de 40 kWh (que se discontinuó hace escasas semanas) y 60 kWh con celdas de LG Energy Solution desaparecerán, siendo sustituidos por otros más grandes con celdas de Envision AESC. El recién presentado Nissan LEAF podría darnos algunas pistas sobre su capacidad.
Recordemos que el LEAF y el Mégane comparten plataforma (CMF-EV, aunque Renault recientemente la renombró como AmpR Medium) y distancia entre ejes (2.69 metros); además, el Nissan también utiliza baterías de Envision AESC. Por lo tanto, lo más seguro es que el Renault monte los packs de 52 y 75 kWh de su primo japonés, que homologa una autonomía de entre 436 y 604 km WLTP.
Renault seguirá utilizando motores propios, por lo que no sería descabellado pensar en unos niveles de potencia similares a los del Scénic, disponible en versiones de 170 CV (125 kW) y 220 CV (160 kW). El sistema de carga también mejorará: la variante de mayor capacidad posiblemente tenga un pico de 150 kW en corriente continua, pudiendo pasar del 10 al 80% en aproximadamente 30 minutos.

El Renault Mégane adoptará una estética inspirada en el Scénic
El renovado Mégane, que se pondrá a la venta en los primeros compases de 2026, también lucirá una estética actualizada. Para empezar, perderá las luces diurnas en forma de Z, pasando a adoptar una firma de tipo boomerang similar a la del Scénic. Los paragolpes por su parte perderán la característica moldura inspirada en el alerón delantero de un Fórmula 1, abrazando un esquema más convencional.
No habrá demasiados cambios en la vista lateral ni en la trasera, aunque no podemos descartar la aparición de nuevas llantas o de unos pilotos de nuevo diseño. El habitáculo también se mantendrá prácticamente inalterado, si bien el sistema de infoentretenimiento basado en Android Automotive podría recibir algunas mejoras, incluida una interfaz ligeramente actualizada.