La producción masiva del Model 3 es crucial para el futuro próximo de Tesla, pues el fabricante americano acumula pérdidas récord que ponen en jaque el futuro de la compañía. Desafortunadamente, las cosas no están saliendo como planeó Elon Musk, y una serie de cuellos de botella en la Gigafábrica de Nevada le han llevado a retrasar los objetivos de producción varias veces.
El objetivo inicial de alcanzar las 5.000 unidades producidas a la semana para finales de 2017 se tuvo que retrasar inicialmente 3 meses, y hoy hemos conocido que un nuevo retraso tendrá lugar, quedando el objetivo para finales del segundo trimestre de 2018. Del objetivo de alcanzar las 10.000 unidades semanales en algún momento del año no se sabe nada, pero seguramente no pueda cumplirse hasta 2019. Lo más probable es que durante la primera mitad del año la producción semanal vaya escalando en menos de 1.000 unidades extra mes a mes.
Hay numerosos indicios de que la producción se ha incrementado, con la primera oleada de entregas a no empleados. Sin embargo, se sabe que se han entregado 1.550 unidades del Model 3 durante todo el cuarto trimestre de 2017, alcanzándose una producción de 1.000 unidades semanales a finales de diciembre.
Ningún analista acertó con sus predicciones. Jeffrey Osborne de Cowen & Co. pronosticó entregas de 2.250 Model 3 en el último trimestre de 2017, por debajo de su estimación anterior de 9.100. Colin Rusch, de Oppenheimer, calculó en cambio tan solo 800. Gene Munster, cofundador de la firma de capital de riesgo Loup Ventures, estimaba en alrededor de 2.500 las unidades entregadas en total para el trimestre.
«La razón por la que seguimos siendo optimistas sobre la historia de Tesla a pesar de los prolongados problemas de producción del Model 3 es porque los eléctricos son el futuro», escribió Loup en una nota de investigación del 28 de diciembre. «Tesla está luchando para ganar la escalada de producción para crear ese futuro«.
Los inversores han sido en gran parte indulgentes con los reveses de producción de Tesla hasta el momento, pues las acciones de Tesla subieron un 46% durante el año pasado. Una tendencia que no parece que vaya a cambiar por el momento, gracias al colchón de confianza que suponen las más de 450.000 reservas del Model 3.
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Fuente | Los Angeles Times
