Volkswagen parece convencida en los progresos con el electrolito sólido de QuantumScape, y compra la mayoría de sus acciones
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Publicado: 26/08/2018 10:30
Desde 2012 el fabricante alemán Volkswagen tiene una pequeña parte de la startup norteamericana QuantumScape. Una empresa dedicada desde hace casi una década al desarrollo de baterías de electrolito sólido. Una de las tecnologías más prometedoras de cara a la próxima generación de coches eléctricos.
Ahora se confirma que el grupo alemán invertirá algo más de 100 millones de dólares en hacerse con la mayoría de las acciones de QuantumScape, lo que le dará el control sobre los futuros desarrollos de la misma.
Esta adquisición ha sido confirmada de forma oficial por el propio Herbert Diess, director ejecutivo de Volkswagen, que durante la presentación de resultados del primer semestre del 2018, donde ha mostrado algunas de las líneas a seguir por la marca en los próximos años. Una hoja de ruta en la que la movilidad eléctrica contará con cada vez mayor protagonismo.
Entre estos planes está la de poner en marcha una instalación de producción de baterías de electrolito sólido. Una fábrica que de momento no tiene emplazamiento, y que el máximo responsable del fabricante germano indica estará en funcionamiento en 2025.
Según fuentes del sector, Volkswagen habría estado probando una serie de celdas de electrolito sólido en varios prototipos en Alemania, y los resultados habían sido incluso mejores de lo esperado. Algo que habría acelerado la inversión para hacerse con la propiedad de una QuantumScape que con esta inyección económica podrá seguir con la evolución de sus trabajos.
Según el director de la división de Investigación del grupo Volkswagen, Axel Heinrich.”Queremos acelerar la comercialización de las baterías de estado sólido de QuantumScape. Combinaremos la experiencia de Volkswagen como especialista en producción y el liderazgo tecnológico de QuantumScape”
El potencial de esta tecnología es enorme. Así lo ha indicado la propia Volkswagen que ha puesto un ejemplo más que ejemplar. Indican que un Golf eléctrico dotado de este tipo de baterías podría ver como su autonomía pasa de unos 300 km actuales, a una cifra de unos 750 km. Además de mayor autonomía gracias a su mayor densidad energética, el electrolito sólido ofrece otras prestaciones como una mayor seguridad al carecer de líquido en su electrolito, y mayor tolerancia a las recargas rápidas. Algo que alarga su vida útil.
Además ocupa un menor espacio, por lo que se pueden optar por instalar más baterías en menos espacio, o reducir el peso de los vehículos, con un impacto en aspectos como el consumo y el precio del mismo.
Una carrera que como vemos avanza lenta, pero inexorablemente, y que en menos de 7 años supondrá la llegada de una nueva generación de baterías que permitirán disparar las autonomías, y reducir peso o espacio. Algo que permitirá no sólo sacar el máximo partido en aplicaciones de transporte personal, sino también disparará su potencial en usos industriales.
Fuente | Volkswagen