Las furgonetas Volkswagen ID. Buzz e ID. Buzz Cargo son un pilar importante en la estrategia de coches electricos de los alemanes. De momento solo se producen en la fabrica de Hanover (Alemania) a un ritmo modesto, con una tirada prevista para este año de 15.000 unidades. En algunos mercados se ha colgado el cartel de «completo», y eso sin que ningun cliente haya visto un ID. Buzz siquiera de cerca.
De acuerdo a una información de Automobilwoche, Lars Krause, responsable de ventas de Volkswagen Vehículos Comerciales, felicitó a los empleados de Hanover por haber superado los 10.000 pedidos, «sin que el coche haya estado en concesionarios ni ningún cliente lo haya conducido», lo cual consideró «alucinante». Esto es una novedad para Volkswagen, pero para otros fabricantes… no tanto.
Aunque la producción arrancó en junio, las entregas del ID. Buzz se producirán a partir de octubre. Hubo un problema con el proveedor de baterías, ya que algunos vehículos no estaban conformes al estándar de calidad de Volkswagen. Solo supimos que el proveedor tenía que solucionar el problema, ya que Volkswagen exige unos parámetros que las celdas deben cumplir, y el problema es más bien del proveedor.
La mayoría de los pedidos vienen, cómo no, de Noruega, con 3.400 unidades. En segundo puesto están los alemanes, con 2.500 pedidos. Les siguen 1.100 pedidos de holandeses y 1.000 de los belgas. Poca sorpresa hay aquí, la mayoría de pedidos vienen del norte de Europa, donde los salarios son altos y la presión fiscal invita a pensar en eléctricos. Por ejemplo, en Alemania la versión comercial arranca en 54.430 euros, y la versión de turismo en 64.581 euros.
En países como el Reino Unido o Francia ni siquiera se han abierto los pedidos. En España las versiones ID. Buzz Pro y 1st Edition tienen precios definidos desde junio, así como la versión ID. Buzz Cargo. De momento el ID. Buzz solo se ofrece en Europa, a Estados Unidos llegará a principios de 2024. Eso sí, Volkswagen espera que la producción aumente mucho, 60.000 unidades en 2023 y hasta 130.000 más adelante.
Una vez más, Volkswagen se ve incapaz de cumplir con la demanda, pero esto es habitual en materia de coches eléctricos. Habiendo tanta lista de espera, salvo que consigan hacer mayoría de contratos de renting, las primeras unidades que salgan a la venta como usadas pueden ser más caras que las pedidas a fábrica. Siempre hay alguien que no quiere esperar y paga por ello.
Fuente | Automobilwoche
