Una de las mayores preocupaciones de los clientes que quieren instalar placas solares y baterías en sus viviendas, es cuánto durarán. En el caso de los paneles fotovoltaicos hemos repasado el otro día la estimación de vida útil. Ahora vamos a hacer lo mismo con unas cada vez más populares baterías para el hogar.
La empresa norteamericana Sunrun ha publicado un estudio donde estima la degradación y los hábitos que nos permitirán alargar la vida útil de las baterías residenciales.
Según la compañía, las celdas son el principal elemento de desgaste debido a los ciclos de carga y descarga. Pero de media, una batería residencial debería tener una vida útil de entre 5 y 15 años. Esto teniendo en cuenta las baterías de plomo, las que menos duración suelen tener, y las de litio, las más longevas y entre las que destacan las dotadas de celdas de litio-ferrofosfato, que pueden mantener el 80% después de entre 5.000 y 6.000 ciclos, lo que con un ciclo completo diario supondría perder apenas el 20% después de 14 años.
Pero las dotadas de celdas NMC, tampoco se quedan muy atrás con cifras de unos 4.000 ciclos hasta el 80%. Algo que se traduce en cifras de vida útil similares a las LFP, debido a que la mayor densidad energética permite producir packs de mayor capacidad, y compensar con el ciclado la diferencia con las LFP.
En este gráfico vemos la estimación de vida útil de una batería de litio-ferrofosfato de 10 kWh de BSL Battery, que nos muestra que después de 6.000 ciclos, la batería seguirá manteniendo el 80% de su capacidad original, llegando a mantener un 50% después de 9.000 ciclos. Algo que realizando un ciclo completo diario supondría llegar a los 24 años.
Pero como en cualquier batería, en este caso hay varios factores que tendrán un efecto en cuanto durará la batería, y que se dividen en varios apartados.
-
Tipo de batería:
En la actualidad las diferentes marcas ofrecen baterías con químicas que van desde las viejas de plomo ácido, las de agua salada, o las más modernas de litio. De los tres tipos, las baterías de litio son las resistentes al paso de los ciclos.
Este tipo de baterías destacan por aspectos como su mayor ligereza, menor tamaño, y sobre todo, una vida útil mucho más larga. No solo eso, además su producción en masa ha permitido reducir su coste de forma masiva en los últimos años, lo que las convierten también en una excelente alternativa en cuanto a precios.
-
Uso de la batería:
La esperanza de vida de una batería está determinada principalmente por sus ciclos de uso. La mayoría de las baterías solares son generalmente baterías de ciclo profundo, lo que les permite descargar hasta el 80% o el 90% de su energía almacenada antes de recargarlas. En este caso la recomendación principal es evitar tanto la descarga profunda, como también llevar la batería hasta el 100% durante demasiado tiempo ya que esto supone elevar la temperatura interna de las celdas, lo que reducirá su vida útil.
-
Temperatura de la batería:
Como hemos dicho, el calor es el gran enemigo de las baterías. Dependiendo de dónde instalemos nuestro sistema podremos marcar una importante diferencia incluso dentro de un mismo emplazamiento. Y es que mantener la temperatura dentro de su rango óptimo permitirá alarga la vida del pack,
Por ejemplo, si vivimos en zonas con un clima templado, la batería podría instalarse al aire libre sin problemas, e incluso dentro de pequeños cobertizos sin grandes medidas de aislamiento. Pero si por el contrario vivimos en una zona donde las temperaturas pueden subir o bajar de forma extrema en verano o invierno, lo más recomendable es instalar la batería en una zona como un garaje, donde la temperatura se mantenga lo más estable posible.
-
Garantía
Los fabricantes de baterías solares ofrecen una amplia gama de garantías para sus productos de baterías. Por lo general, las baterías de plomo-ácido se encuentran en el extremo inferior del espectro de garantía y las baterías de de litio están cubiertas por 10 años o más.
-
Mantenimiento
Los fabricantes no suelen indicar nada al respecto, pero el mantenimiento adecuado nos permitirá alargar la vida de la batería. Un mantenimiento que puede hacerse de forma remota, y que permita comprobar que todo funciona de forma correcta.
Fuente | Sunrun
