La prohibición de ventas de coches de combustión sí son importantes para alcanzar los objetivos de emisiones
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Publicado: 27/09/2023 09:01
Esta semana hemos visto tres noticias que nos avisan de que queda mucho camino por recorrer para lograr ponernos en el camino correcto para lograr reducir nuestras emisiones. Una es el estudio de la Agencia Internacional de la Energía, que pone al coche eléctrico y las renovables como clave para lograrlo. El otro, el anuncio de Reino Unido de retrasar la prohibición de ventas de coches de combustión, mientras que la UE ha decidido reducir las exigencias de la nueva Euro 7.
Para muchos, estas medidas no son importantes ya que el mercado está moviéndose cada vez más rápido hacia la electrificación. Algo que para marcas como Volkswagen, supondrá que para 2030 el 80% de sus ventas serán coches eléctricos, mientras que apenas dos años después, en 2033, ya serán el 100%.
Esto puede parecer que deja el objetivo de la UE, y ahora también de Reino Unido, de prohibir las ventas de coches con motor de combustión en 2035 en papel mojado. Pero por desgracia, no es así.
Podemos recordar las hasta cierto punto contradictorias palabras del Primer Ministro de Reino Unido, Rishi Sunak, durante el anuncio del retraso de la prohibición: “Espero que para 2030 la gran mayoría de los coches vendidos sean eléctricos. ¿Por qué? Porque los costes se están reduciendo; la gama está mejorando; la infraestructura de carga está creciendo. Pero también creo que, al menos por ahora, deberías ser tú el consumidor quien tome esa decisión, no el gobierno que te obligue a hacerlo«.
Si bien para algunos expertos la fecha inicial de Reino Unido de 2030 nunca fue en realidad una fecha límite formal, las palabras de Sunak han generado temores de que el Reino Unido no cumplirá sus objetivos climáticos.
Las prohibiciones si son necesarias
Por ejemplo, desde Bloomberg se hacen la pregunta de que: «Si Sunak no quiere decirle a la gente lo que pueden o no comprar, ¿por qué no elimina totalmente la prohibición? Eso es porque se necesitan prohibiciones. Un análisis rápido muestra por qué.»
Reino Unido es uno de los mercados que más fuerte han crecido en cuanto a ventas de coches eléctricos. Si se deja que sea el propio mercado el que haga el trabajo, la cuota de ventas de los coches eléctricos llegará al 97% para 2050. Aún faltan casi 30 años para eso, lo que significa que el Reino Unido si conseguirá una elevada implantación, pero no alcanzará sus objetivos climáticos dependiendo únicamente del mercado.
Esto significa que sí, el mercado se transformará hacia la electricidad, pero no lo suficientemente rápido como para lograr cumplir objetivos de reducción de emisiones.
Alcanzar los objetivos de cero emisiones netas marcadas para 2050, requiere que los coches eléctricos representen el 100% de las ventas nuevas como muy tarde en 2035. Esto se debe a que la vida media de un coche es de unos 15 años. Por lo tanto, convertir toda la flota a cero emisiones hará que sea fundamental que las ventas sean exclusivamente eléctricas entre 2035 y 2050.
Unas medidas políticas que no sólo tendrán efecto entre los consumidores, que tendrán más clara su decisión de futuro, sino también tendrá su influencia entre los fabricantes, que podrán justificar ante sus consejos la apuesta al 100% por el coche eléctrico de cara a próximas inversiones.
Y es que estas inversiones multimillonarias no se deciden de un día para otro, y dependen en gran parte de la posición política.
Así lo indica Bloomberg: «Esos ciclos de inversión para los fabricantes son bastante largos. Incluso si las fábricas se pueden convertir para fabricar coches eléctricos, hay cosas como la cadena de suministro y el diseño de las plataformas que requieren un período de tiempo prolongado«.