Los proveedores de piezas de coches eléctricos dan la bienvenida con los brazos abiertos a las marcas chinas

Los proveedores de piezas de coches eléctricos dan la bienvenida con los brazos abiertos a las marcas chinas
Los fabricantes chinos tuvieron una buena acogida durante el IAA de Múnich de este año.

6 min. lectura

Publicado: 06/09/2023 11:54

El IAA de Múnich 2023 supuso la gran apertura de los fabricantes chinos de coches eléctricos en Europa. Una confirmación de que ya están aquí y que han venido para quedarse. Marcas como BYD, MG, Seres, Leapmotor… mostraron todo su potencial.

Lo cierto es que el escenario, Alemania, ha sido muy propicio para las marcas chinas. Las ventas en el mercado germano en agosto nos dejaron una cuota para los coches eléctricos del 31,7%. Además, a diferencia de otros países como Francia, por ejemplo, en Alemania no se han puesto trabas para la llegada de las marcas desde China. MG, por ejemplo, ha sido el octavo fabricante con más ventas allí el pasado mes.

No obstante, los grandes fabricantes occidentales observan con cautela y cierto temor la llegada masiva de estos fabricantes al mercado europeo, con modelos eléctricos más accesibles y con unos niveles más que aceptables. Hay disparidad de opiniones en este tema, incluso entre los propios jefes de las marcas alemanas.

Los que sí que no ven con malos ojos esta llegada de los coches eléctricos chinos, sino todo lo contrario, son las empresas proveedoras del país alemán. Durante el IAA, compañías como Bosch, Continental o ZF también estuvieron presentes y mostraron su opinión al respecto.

El IAA de Múnich 2023 dio la bienvenida a un gran puñado de fabricantes chinos.

Las relaciones entre marcas como las antes comentadas y el mercado chino son ya, de partida, favorables, ya que existen acuerdos de colaboración en el mercado asiático. Sin embargo, la llegada masiva de los fabricantes chinos abre nuevas oportunidades de negocio que no pueden dejarse pasar. Aunque afectar directamente a las ventas de los gigantes occidentales, podrían significar también más puestos de trabajo con la creación de nuevos centros de producción en nuestra región, tanto de coches como de baterías.

Así es como lo ven, por lo menos, compañías como Bosch, que acogen con gran satisfacción los planes de las marcas chinas en Europa, ya que se les podrá proporcionar piezas fabricadas aquí mismo para sus nuevos coches eléctricos. Por ejemplo, la firma alemana ya colabora en el desarrollo de los ADAS y motores eléctricos para muchos fabricantes chinos, como BYD o Nio.

«Los fabricantes chinos adaptarán los vehículos al mercado europeo paso a paso a través de la experiencia del usuario y la orientación al cliente», aseguró en Múnich el director general de Bosch, Stefan Hartung. «Es una buena manera de hacerlo y también bastante natural para nosotros como proveedores, porque todos conocemos a estos fabricantes gracias a nuestra colaboración en China».

El caso de ZF tiene un mayor relieve si cabe, ya que sus ventas en China representaron el 20% de su volumen de negocio en 2020, contando con 40 ubicaciones dentro del país asiático. Ahora, la llegada de estas marcas a Europa y el establecimiento de nuevas plantas de producción abre nuevos horizontes. «Cuando hablamos con nuestros clientes chinos, hay planes muy concretos para construir plantas en Europa. Estamos en conversaciones allí», asegura Holger Klein, director general de ZF.

La amenaza china ‘va por barrios’

No todas las marcas europeas ven con malos ojos la llegada masiva de las marcas chinas. Como decíamos, todo va según el punto de vista de cada fabricante: el CEO del Grupo VW, Oliver Blume, dijo en el IAA de Múnich que los chinos no representan una amenaza real en Europa, ya que su necesidad de adaptación a los estándares europeos harán que su precio final no sea tan bajo como cabía esperar.

«Nosotros tenemos conocimientos sobre coches, nivel de calidad y herencia de marca, por lo que nos vemos bien posicionados. Los fabricantes de automóviles chinos no representan una amenaza para las empresas europeas», aseguró el mandamás de VW.

Y en parte tiene razón: si bien el precio medio de los coches eléctricos en China es de unos 32.000 euros, según datos de JATO Dynamics, en Europa lo es de 56.000 euros aproximadamente, los precios de las marcas chinas en Europa no serán tan accesibles.

Sin embargo, ya nos encontramos con algunos ejemplos que, al menos, sí que están batiendo a los fabricantes europeos. El MG4, sin ir más lejos, se ofrece desde los 29.480 euros, un precio más asequible que alguno de sus rivales, como Citroën ë-C4, Cupra Born o VW ID.3.

Fuente | Automotive News Europe

Este artículo trata sobre...