En marcha la primera caldera que funciona con hidrógeno verde en Madrid. ¿Son una opción real?

En marcha la primera caldera que funciona con hidrógeno verde en Madrid. ¿Son una opción real?
Madrileña Red de Gas instala su primera caldera alimentada por hidrógeno verde.

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Publicado: 04/12/2023 08:00

La carrera por la descarbonización y por conseguir alternativas limpias a los combustibles fósiles nos lleva a soluciones como estas, utilizando el hidrógeno verde (100% H2) también para obtener calefacción doméstica. Lo más habitual en las calderas, para proveer de calefacción a las viviendas, negocios, etc, es utilizar el gas natural. Sin embargo, el hidrógeno puede ser una alternativa de futuro.

Madrileña Red de Gas ha seguido este camino con la instalación de la primera caldera que es capaz de funcionar con hidrógeno verde en Madrid. Gracias a una caldera prototipo de Vaillant, de 25 kW de potencia, se proveerá de calefacción y Agua Caliente Sanitaria para una sala de descanso de una de sus sedes en la región.

La caldera tiene un tamaño y una forma similar a las típicas calderas de gas natural, y ha sido instalada siguiendo con la normativa vigente de gases combustibles. La instalación interior para llevar el hidrógeno verde desde su almacenamiento hasta la caldera fue realizada por Centralgas, siguiendo los reglamentos actuales.

En esta instalación, Madrileña Red de Gas cuenta con la colaboración de las mencionadas Vaillant y Centralgas, además de Agremia y Carburos Metálicos. El objetivo es el de aportar una solución más eficiente para la producción de calefacción y agua caliente, con un combustible «limpio, seguro y renovable», que solo libera vapor de agua en su combustión.

Las diferentes formas de producir hidrógeno para su uso. Gráfico: Acciona.

La empresa madrileña sigue adelante en su empeño por llevar esta tecnología al campo real. Sus últimos acuerdos han implicado también a la Universidad Francisco de Vitoria para «desarrollar la la tecnología de hidrógeno verde, desde su investigación hasta su puesta en marcha». Junto a PRYCONSA, además, se firmó un acuerdo para llevar el hidrógeno renovable a 100 viviendas de Valdemoro.

¿Tiene futuro el hidrógeno en los sistemas de calefacción?

Ahora bien, como sabemos, la producción de hidrógeno no siempre está aparejado a un proceso libre de emisiones. En el caso de la nueva caldera de Madrileña Red de Gas, se asegura su alimentación con hidrógeno verde, también llamado hidrógeno renovable: es aquel producido con renovables y agua por electrólisis, sin usar combustibles fósiles.

No obstante, pensar en una producción a escala de este hidrógeno verde es todavía una quimera, debido a los altos costes que implica. Actualmente, la electrólisis produce alrededor del 5% del hidrógeno global; el resto, la gran mayoría, se basa en gas natural y carbón.

Las calderas que funcionan con hidrógeno son ya una realidad, más allá del prototipo instalado por la compañía madrileña. Son calderas muy similares a las de gas natural, si bien para su sustitución por las convencionales se necesitaría afrontar unos altos costes de conversión y, además, disponer del suministro de hidrógeno a través de las tuberías de gas natural, algo que no está implantado todavía.

La respuesta más fácil a la pregunta planteada es no, a día de hoy es difícil contemplar el hidrógeno como una solución viable para los sistemas de calefacción. Según un estudio del instituto de investigación alemán Fraunhofer (IEE) y plasmado por la OCU, «la incorporación de un 20% de hidrógeno a la red de gas natural podría provocar un aumento de hasta un 16% del precio a los consumidores domésticos, al ser este combustible significativamente más caro que el gas natural actualmente».

Las cifras no salen: «Desde un punto de vista medioambiental, la medida también es descartable por ineficiente, pues la mezcla de un 20% de hidrógeno en la red de gas solo ahorraría un 7% de emisiones de gases con efecto invernadero».

Los costes y la eficiencia son dos de las razones de más peso que hacen descartable, a día de hoy, el uso del hidrógeno (y más el verde) para sustituir las actuales calderas por bombas de calor. Por ejemplo, implicaría desplegar muchas más energías renovables para producir menos energía final, pero ello supondría aumentar las emisiones la producción de elementos como los paneles solares, las turbinas eólicas… Según los estudios, entregar una unidad de calor con hidrógeno verde requiere entre cinco y seis veces más electricidad que con las bombas de calor: ergo más recursos, más terreno y más inversión.

No olvidemos que España es uno de los países líderes en la Unión Europea en proyectos estratégicos de hidrógeno verde, con el gasoducto H2Med como uno de sus proyectos más ambiciosos para el 2030. «Ya tenemos muchos proyectos de hidrógeno verde en España y otros países, pero aún no sabemos cuál va a ser el apoyo para esos proyectos», advirtió Ignacio Galán, presidente de Iberdrola.

Fuente | MRG