La unión hace la fuerza, y eso es lo que han entendido los consejos de administración de BMW y Mercedes-Benz, que han presentado el pasado año un proyecto para crear una gran red de cargadores rápidos para coches eléctricos, comenzando por China. Un movimiento de grandes dimensiones que ha involucrado a la Comisión Europea, que ha dado luz verde.
Como recordamos, el proyecto supondrá que BMW Brilliance, filial de la compañía en China, y Mercedes-Benz han puesto en marcha una colaboración en el gigante asiático para establecer una importante red de puntos de recarga rápidos en una empresa conjunta al 50%.
No es la primera colaboración de ambas en este sector, y por ejemplo, podemos recordar su participación en el consorcio IONITY, que está desplegando una red de carga ultrarrápida en Europa.
El objetivo común de los dos fabricantes germanos es el de instalar al menos 1.000 estaciones de recarga antes de finales del año 2026, lo que implicaría instalar miles de nuevos puntos de recargar rápidos para esa fecha en las carreteras chinas.
La unión en China estaba supeditada a cuestiones legales y regulatorias, y hace unas horas la Comisión Europea ha dado permiso para este movimiento, dado que no estiman vaya a tener impacto en el Espacio Económico Europeo, en un acuerdo que no generará problemas de competencia.
Está previsto que el primer lote de estaciones de carga comience a operar en las ciudades clave para el coche eléctrico en China a lo largo de este mismo año, y la construcción posterior de nuevas estaciones también cubrirá otras ciudades y regiones de todo el país.
Como era de esperar, la red de carga de BMW y Mercedes estará abierta a todas las marcas y modelos compatibles con su formato, y según el plan, los clientes de Mercedes-Benz y BMW podrán disfrutar de servicios exclusivos, como la tecnología plug-and-charge, tarifas específicas, reservas online de puntos, y otras experiencias de carga digital.
Un mercado, el de China, donde en el sector de la carga pública dominan NIO y Tesla. En el caso de los primeros, incluyen también las estaciones de intercambio de baterías, así como puntos de recarga abiertos a otras marcas. La marca norteamericana, por su parte, empieza a abrir poco a poco sus Supercargadores en favor de los coches eléctricos de otras marcas.
