Hace unos días conocíamos los resultados de la prueba de autonomía de coches eléctricos que cada año realiza la Federación Noruega de Automóviles. Un test que este año ha tenido como protagonistas a los modelos chinos. Ahora, las pruebas se han centrado en los tiempos de carga rápida, donde los coches chinos han logrado los mejores resultados.
Las condiciones de la prueba supone el iniciar una sesión de carga rápida después de más de dos horas de conducción, y con la batería con un mínimo del 10% de carga restante, en una sesión que les llevará hasta el 80% de carga.
China, domina la carga rápida
Estos test se han realizado en condiciones de frío, lo que supone un reto para las baterías y los sistemas de carga en corriente continua de los vehículos, y donde los modelos chinos han logrado imponerse con mucha diferencia a sus rivales.
Estos han logrado hacerse con cuatro de los cinco primeros puestos, con un KIA EV9 que ha sacado provecho a la experiencia del fabricante coreano en este tipo de operaciones.
El más rápido ha sido el Xpeng G9 en su versión Performance. Un modelo con un potente sistema de dos motores y 405 kW (551 CV) que monta una batería de 98 kWh, con una autonomía homologada bajo el ciclo WLTP de 570 km.
Este ha conseguido alcanzar una potencia pico de 291 kW, con una media de 219 kW, que le han permitido completar el proceso del 10 al 80% en 19 minutos. Algo que supone no solo la mejor marca, sino incluso recortar en un minuto el tiempo que declara el fabricante.
Por detrás se coloca otro SUV premium chino, el Lotus Eletre S, con batería de 112 kWh y 600 km WLTP, que ha logrado una potencia pico de 315 kW, una media de 221 kW, con el que ha completado el proceso de carga en 20 minutos.
Por detrás se han colocado dos modelos de NIO, el EL6 y ET5 Touring, ambos con la batería de 100 kWh, que también han logrado tiempos de carga impresionantes de 22 y 26 minutos respectivamente hasta el 80%.
El primer representante no chino ha sido el KIA EV9, que ha recargado hasta el 80% sus 99 kWh en 24 minutos, sacando partido a su arquitectura de 800V, con una buena curva de carga que solo aflojó algo al llegar al 80%.
Llama la atención por otro lado que su primo hermano, el Hyundai IONIQ 6, no haya llegado a este nivel, con un tiempo de 34 minutos. Más tiempo para un modelo con una batería mucho más pequeña, 74 kWh, lo que además supone 16 minutos más de lo que indica el fabricante.
El primer representante europeo ha sido el Volkswagen ID.7, en su versión de 77 kWh, que ha completado la sesión en 26 minutos.
Una de las conclusiones de la prueba es que como sabemos, la potencia pico no es lo más importante, y lograr una curva más estable es también fundamental. Algo que se escenifica en un Tesla Model 3 Long Range que a pesar de declarar una potencia máxima de 250 kW, ha sido de los peores de la comparativa, con 34 minutos para lograr llegar al 80%.
También destacar la mejora generalizada de los coches eléctricos en el mercado, que cada vez pueden cargar más rápido sus baterías, llegando a un punto donde las paradas apenas dan tiempo a tomar un café antes de tener que continuar con el recorrido.
Pero no podemos dejar pasar el dato de la evolución que están logrando los grupos chinos, que cuentan con modelos cada vez más atractivos, equipados, eficientes, y además con unos sistemas de carga superiores.
