A pesar de que los precios están en tendencia a la baja, la realidad es que hoy en día comprarse un coche eléctrico sigue suponiendo un importante esfuerzo económico respecto a los modelos con motor de combustión. Pero cada vez hay más opciones en el mercado de segunda mano, y también en el arco de precio de los 10.000 euros.
Para los que busquen un coche eléctrico en el entorno a los 10.000 euros, una de las condiciones fundamentales es que además de un modelo de segunda mano, tendrá que ser uno con una autonomía real de entre 100 y 150 kilómetros.
Renault ZOE
El Renault ZOE es uno de los principales protagonistas del mercado de ocasión. El Renault ZOE ha sido uno de los modelos de la primera generación más vendidos y que mejor se ha ido adaptando a los nuevos tiempos con hasta tres renovaciones desde su lanzamiento en 2013.
Se trata de un compacto con un cuerpo manejable para movernos por la ciudad, 4.08 metros de largo, cinco plazas y un maletero bastante competente de 338 litros, mayor incluso que el de su hermano el Renault Clio. El motor de la primera generación, las más económicas, era de 65 kW (88 CV) y su batería contaba con 22 kWh útiles, suficientes para recorrer unos 120 o 130 km reales.
Como hemos dicho, el ZOE tiene hasta tres «generaciones». Una primera que arranca en 2013 y que se mezcla con la segunda hasta 2016. Se trata de una versión con algunos pros, como su precio más competitivo y su recarga en alterna a 43 kW, pero con algunas contras muy importantes, como su extrema cautela a la hora de los requisitos durante la recarga. Algo que se traduce en que si las condiciones del punto no son óptimas, no nos dejará cargar.
Es por eso que sin duda, es mucho más interesante optar por la versión R240. Vendida a partir de 2015, esta versión llega con importantes novedades como la sustitución del sistema Continental (Q) por uno de Renault (R). Esto se traduce básicamente en un motor fabricado por la propia Renault, y un nuevo sistema de carga que pierde la carga en alterna a 43 kW, quedando en 22 kW que en una hora nos permite llegar al 100%. Pero esta pérdida la suple con creces al contar el propio sistema una tolerancia mucho mejor que el anterior modelo.
Además la batería, que también está refrigerada por aire forzado, eleva su capacidad útil hasta los 23.6 kWh (26 kWh brutos) lo que supone ganar un poquito de autonomía respecto al modelo de primera generación y llegando a los 140 o 150 km reales.
Sus precios rondan los 11.000, 12.000 euros, con batería en propiedad. Y es que podremos encontrar unidades más económicas, por debajo de los 10 mil euros, pero muchas de ellas son primera generación, con muchos kilómetros, o con la batería en alquiler.
Nissan LEAF
El Nissan LEAF es también uno de los más veteranos, casi el que más, y es por eso que el mercado de ocasión se vea nutrido de unidades de segunda mano de lo más variadas.
Se trata de una opción muy válida en lo estético, prestacional, equipamiento…etc. Un coche eléctrico con un diseño diferente con espacio para cinco pasajeros y con un maletero que es el más amplio de toda la comparativa.
El principal problema del LEAF es que en sus primeras generaciones su batería sufre una constante degradación que además no tiene final. Por lo tanto, eso quiere decir que podremos comprar una unidad con 120 o 150 km de autonomía, pero esta irá menguando.
El LEAF puede ser una buena alternativa para alguien que busque un coche amplio, con el que vaya a hacer muy pocos kilómetros. Una propuesta donde podremos encontrar unidades con precios desde 10.850 euros para unidades del 2016. Una versión que montaba una batería de 30 kWh brutos, que nos darán en torno a los 100-120 km con cada carga.
Como hemos dicho, en este caso debemos vigilar el estado de la batería tanto de una forma rápida viendo cuantas barras tiene su marcador de salud de la propia batería, 10 barras en el caso del anuncio que enlazamos, como mediante un diagnóstico por parte del vendedor. Pero sin duda la mejor forma es hacer una prueba de autonomía y ver hasta donde puede llegar.
Un LEAF perfecto para los que recorran pocos kilómetros y necesiten un vehículo amplio y atractivo, que incluso el día de mañana podrán invertir en cambiarle la batería por una nueva y recuperar su vigor original.
BMW i3
Una propuesta que ha visto bajar bastante sus precios, principalmente por que los años no perdonan a las primeras generaciones, es el BMW i3. Un modelo que destaca por su diseño diferente, un ligero cuerpo de fibra de carbono, y un potente motor de 170 CV que le permiten convertirse en el rey de los semáforos.
Las versiones más económicas corresponden a unidades del 2015-2017 con la batería de primera generación con 22 kWh brutos, unos 17 kWh útiles, que le otorgan una autonomía real de unos 100 kilómetros. Una alternativa como vemos diferente en lo estético, divertida en la conducción, pero de muy baja autonomía. Además el sistema de carga contaba con elementos opcionales para poder cargar más allá de los 3 o 7 kW, por lo que además los tiempos de espera para una carga serán muy largos. Algo muy a tener en cuenta.
Uno de los puntos interesantes del i3, es que su batería parece tener una durabilidad a prueba de bombas. Las celdas Samsung refrigeradas por líquido tienen una vida útil extremadamente larga, lo que nos permite poder arriesgar con unidades con más de 100.000 km, con precio en torno a los 13.000 euros.
Sin duda en ese caso la versión eléctrica con extensor de autonomía parece la alternativa más interesante, debido a la baja autonomía eléctrica. Un extensor que como recordamos, proporciona otros 150 km de autonomía, y pudiendo recuperarla al momento en cualquier gasolinera. Unas variantes que han visto como su depreciación era incluso mayor que la eléctrica, con unidades del 2014 con 150.000 km con precios desde 14.000 euros.
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KIA Soul EV
Por debajo de los 14.000 euros también podemos encontrar modelos de la anterior generación con unos buenos conjuntos mecánicos y de equipamiento, como el KIA Soul.
Una propuesta con potente motor de 111 CV, que nos permitirá lograr unas aceleraciones destacables. La batería de esta unidad del 2015 está formada por las nuevas celdas de 80 Ah, que llegan a los 30.4 kWh brutos, y 27 nominales, que le permiten contar con una autonomía de unos 160 kilómetros reales.
Entre los puntos negativos, el contar con una toma de carga CHAdeMO para la carga rápida. Un formato en retroceso en Europa frente al CCS Combo. Pero a cambio nos podremos llevar un modelo diferente en lo estético con un precio de 13.980 euros.
