Desde hace años, estamos escuchando a los más críticos indicando que no se comprarán un coche eléctrico hasta que estos hagan al menos 1.000 km de autonomía. Pero este momento está mucho más cerca de lo que pensamos, y como ejemplo el hito que esta semana ha logrado el fabricante chino NIO de la mano de su nuevo ET7.
No hablamos de un prototipo, ni de unas cifras logradas en el entorno cerrado y controlado de los test de homologación.
Y es que NIO ha completado hasta tres pruebas de autonomía real en carretera abierta con un ET7 que como recordamos, ya está a la venta en China con unas entregas que comenzarán a finales de este mismo mes de abril.
NIO ET7: más de 1.000 km de autonomía real
La compañía con sede en Shanghai realizó una serie de pruebas de autonomía este pasado martes 16 de abril en tres rutas diferentes, alcanzando una autonomía de 1.070 km, 1.062 km y 1.046 km, respectivamente.
El ET7 alcanzó la autonomía más alta en la ruta entre las ciudades de Kunming y Zhanjiang, logrando cubrir 1.070 km con una carga completa, con un consumo medio de apenas 12,7 kWh/100 km. En este caso, NIO ha indicado además que este recorrido se ha cubierto en un 70.7% usando el sistema de conducción autopilotado Pilot Plus (NOP+), lo que representa 757 km con el coche conduciendo de forma autónoma.
La segunda ruta cubrió la distancia entre Pekín y Hefei, donde se encuentran las fábricas de Nio. El ET7 logró una autonomía de 1.062 km con un consumo de 13,0 kWh/100 km, mientras que el uso de la conducción autónoma se reduje hasta el 40.3%, o 429 km.
en el tercer caso, la ruta ha llevado al ET7 desde Shanghai a Xiamen, y donde el ET7 alcanzó la autonomía de 1.046 con un consumo de energía medio de 13,3 kWh/100 km.
Curiosamente, en esta última ruta es donde mayor consumo se ha realizado, y coincide con la que menos se ha usado la conducción autónoma, con el 37.6% del recorrido. Una pista de que la conducción autónoma puede ser más eficiente que la manual a la hora de largas distancias.
La parte negativa de todo esto es que el ET7 ha logrado este hito gracias a una batería semi-sólida de 150 kWh, que no está a la venta. Los interesados en moverse con ella tendrán que adquirir el coche y alquilar la batería. Para el resto, quedan las opciones de 75 y 100 kWh.
Un pack que además es compatible con las estaciones de cambio de batería, y que cuenta con una densidad energética en celda de 360 Wh/kg, y en pack de 260 Wh/kg.
Según su fabricante, WeLion, el sistema de refrigeración es seis veces más potente que el de las baterías normales, en un pack que tiene un peso de 676 kg, sólo 20 kg más que la batería de 100 kWh de la propia Nio, y 227 kilos menos que la batería de 135.5 kWh de BYD.
Una tecnología que tendrá que evolucionar en cuestiones como su capacidad de producción. Una economía de escala que debería bajar los precios en los próximos años.
Fuente | NIO
