2.000€ más barato que un gasolina y con casi 100 CV extra, un SUV eléctrico sí puede ser barato

La paridad de precios entre los coches gasolina y sus equivalentes eléctricos, en contra de lo que muchos creen, está llegando poco a poco. No solo con nuevos modelos eléctricos más baratos, sino también con bajadas de precios de algunos de los que ya conocemos. Un fabricante que está arrancando la tendencia a la baja de sus precios es precisamente BYD. Que sólo lleva un año –y poco más- en nuestro mercado, pero no deja de ser el líder mundial en coches enchufables. Así que saben bien por dónde se andan.

BYD está bajando precios, ahora el Atto 3 puede ser más barato que un Tucson gasolina

La marca china BYD ha empezado a bajar sus precios, y de momento son el Dolphin y el Atto 3 los que se han visto afectados por la actualización de tarifas. Este segundo, que por dimensiones es rival del Hyundai Tucson o el KIA Sportage, entre otras opciones gasolina, tiene un precio que arranca en 25.290 euros. Evidentemente, contando con todas las condiciones más favorables entre las que está el Plan MOVES III. Pero es que si consultamos los precios a los que se vende el exitoso Hyundai Tucson, lo más barato por lo que se puede encontrar son 27.925 euros.

Más allá de que lo estamos comparando con modelos que tan solo son gasolina, sin ningún tipo de electrificación siquiera, y a los que les corresponde la etiqueta C de la DGT, existen algunas otras diferencias importantes. Una de ellas, desde luego, es que la oferta de estos dos SUV surcoreanos empieza en 116 CV de potencia y, sin embargo, el BYD Atto 3 cuenta con un motor eléctrico que desarrolla 204 CV de potencia máxima. Es decir, que no solo sale más barato si podemos aprovechar las condiciones más beneficiosas, sino que además ofrece un rendimiento bastante superior. Esto es habitual con los eléctricos, nada especial del BYD Atto 3.

Los precios de los coches eléctricos van a seguir bajando

Aunque estamos justo en medio de la polémica por la entrada en vigor de nuevos aranceles contra la importación de coches eléctricos chinos, hay marcas que ya están preparándose. BYD es una de ellas, con dos fábricas en suelo europeo que ya están en camino. Y que permitirán no solo dar la espalda a los aranceles, sino también reducir los importantes costes a los que tienen que enfrentarse a día de hoy por la logística que conlleva traer estos vehículos desde China, que es donde se están fabricando en la actualidad.