
Bueno, bonito y barato: la receta de este coche eléctrico chino para arrasar
Un nuevo urbano eléctrico ha revolucionado el mercado chino con decenas de miles de pedidos en apenas dos días. La receta es simple pero efectiva: diseño retro, características técnicas más que decentes, y un precio de derribo.

El nuevo Wuling Bingo S se ha convertido en un éxito inmediato en el mercado chino, con 55.840 reservas en apenas dos días después de su lanzamiento. Este pequeño eléctrico urbano, que ya está siendo entregado a los primeros clientes, es un ejemplo perfecto de por qué triunfa el coche eléctrico en el mercado chino.
En el apartado estético, el Bingo S sigue la línea retro y redondeada ya vista en los Bingo y Bingo Plus. Destacan los faros poligonales de inspiración clásica y la posibilidad de elegir carrocerías bicolor y llantas personalizadas. En la zaga adopta una tira de luz continua y un embellecedor plateado en el paragolpes. Hablamos de un compacto del segmento B con un cuerpo de 4.26 metros de largo y una distancia entre ejes de 2.610 mm que rivalizará con propuestas como el BYD Atto 2.

El habitáculo, homologado para cinco plazas, presume de un buen aprovechamiento del espacio. En la primera fila se disponen de 1.008 mm de altura libre, mientras que la segunda ofrece una distancia entre respaldos de 882 mm.
En equipamiento, incluso en las versiones básicas, incluye un cuadro digital de 8,8 pulgadas y una pantalla central flotante de 12,8 pulgadas, conectividad Bluetooth, arranque sin llave, faros automáticos y control de crucero. En los acabados superiores añade cámara de visión panorámica, asientos delanteros calefactados con regulación eléctrica, retrovisores eléctricos y calefactados, además de carga inalámbrica de 50 W. El sistema multimedia se basa en la plataforma Lingyu AI.

A nivel técnico, utiliza un motor eléctrico de 75 kW asociado a dos opciones de batería: una de 31,9 kWh con 325 km de autonomía CLTC y otra de 41,9 kWh con 430 km CLTC. La recarga rápida en corriente continua permite pasar del 30% al 80% en unos 35 minutos. La batería, LFP, desarrollada por la propia Wuling, incorpora la estructura MUST (Modular Ultra-Safety Technology) que refuerza la seguridad activa y pasiva. Algo que nos avisa del nivel de desarrollo incluso en los segmentos de acceso.
Los precios en China oscilan entre 66.800 yuanes (8.800 euros) y 79.800 yuanes (10.500 euros). Precios antes de ayudas o promociones como la que ha puesto en marcha la marca para lograr un lanzamiento lo más llamativo posible. Algo que, como hemos visto, han logrado con creces.
Un ejemplo perfecto de como debe desarrollarse un mercado sano de coches eléctricos, con opciones para todos los bolsillos y todas las circunstancias. Algo que nos falta en Europa.